Las protestas de agricultores han provocado problemas de circulación en tres carreteras de Castilla-La Mancha en las provincias de Albacete, Toledo, Ciudad Real y Cuenca. Su tractorada también ha derivado en retenciones y cortes de tráfico en Toledo capital donde han irrumpido más de un centenar de tractores, llegados desde varios puntos de la provincia, en una concentración no anunciada ni autorizada.