"En dos semanas" se habrá terminado la vacunación de los usuarios y trabajadores de las residencias de ancianos en Castilla-La Mancha.
Lo ha anunciado hoy el consejero de Sanidad, Jesús Fernández Sanz, en Albacete quien además ha comentado que la región tomaba "velocidad de crucero" -la que anunciaba el ministro Salvador Illa- el día 4 de enero después de recibir la primera gran remesa de vacunas el pasado 30 de diciembre y después del parón navideño en la administración de las dosis.
Hoy Fernández Sanz ha dicho que se contempla a las vacunas "como una fuente de esperanza" y realizaba un nuevo llamamiento a la "responsabilidad" sin ocultar preocupación por los datos de nuevos contagios que se están recogiendo desde el mes de noviembre. "Estamos pasando un momento difícil, ayer con más de 1.500 nuevos casos, de los mayores que tenemos desde que se inició la pandemia", remarcaba.
Ahora, en su opinión, "la vacuna nos posiciona de manera diferente y creemos que solucionará en gran parte lo que está pasando", pero ha recordado que se trata de "una carrera de fondo en la que todos debemos implicarnos. Tenemos perfectamente diseñada la estrategia. El seguimiento se hace minuto a minuto", aseguraba.
También ha desvelado, ante las críticas de la oposición por el parón en el proceso de vacunación durante los días festivos navideños, que en Castilla-La Mancha "se vacunó el Día de Reyes".