La temporada invernal y el incremento de enfermedades respiratorias ha vuelto a saturar esta Navidad los servicios públicos de salud. El Hospital de Toledo no es ajeno a estas circunstancias y este pasado martes registró un "colapso" en las Urgencias, tal y como denuncia UGT.
El sindicato señala que a última hora del segundo día del año había 210 personas en las Urgencias del Hospital y otras 22 pendientes de ubicar en esta unidad. Además, advierte de "la falta de médicos en algunos centros de salud de la provincia".
UGT señala que la alta presión asistencial que sufren los profesionales de esta unidad repercute en el tiempo que los pacientes tienen que esperar desde que se realiza el triaje hasta que son atendidos por un médico.
La responsable de Sanidad en Toledo de UGT Servicios Públicos, Inés Pedreño, asegura que, en estos momentos, los pacientes de Urgencias "duplican la capacidad de estas instalaciones, algo a lo que suma la falta de médicos en algunos centros de salud de la provincia, como sucede en las localidades de Argés y Fuensalida".
"La Atención Primaria está también afectada por la alta incidencia de patologías respiratorias, lo que contribuye a la saturación de las Urgencias del Hospital", añade Pedreño, que apunta es "una situación que se repite cada año". "Ya ocurría en el Virgen de la Salud y sigue pasando en el nuevo Hospital de Toledo", subraya.
Por ello, el sindicato ha pedido al Sescam "una mejor adecuación de profesionales para las unidades que tienen en estas fechas una mayor demanda" y que "se garantice en todo caso la presencia del 100% de profesionales en los centros de salud de Atención Primaria, para evitar en la medida de los posible la saturación de los servicios hospitalarios".
CSIF exige protocolos y medidas de prevención
Por su parte, la Central Sindical Independiente y de Funcionarios (CSIF) ha exigido la activación de protocolos y medidas de prevención que eviten el colapso en la Atención Primaria y en los Servicios de Urgencias de los centros hospitalarios.
En este sentido, expone que los últimos datos del Sistema de Vigilancia de Infección Respiratoria Aguda, relativos a la semana del 18 al 24 de diciembre, alcanzaron los 1.368 casos por cada 100.000 habitantes en Castilla-La Mancha, cuando la media nacional se encuentra en 908,6 casos.
CSIF entiende que debe haber anticipación y prevención para evitar que la situación empeore, y exige tanto al Ministerio de Sanidad como al Servicio de Salud de Castilla-La Mancha que refuerce con personal y medios los diferentes puntos de atención a pacientes, plantee y recomiende el uso de las mascarillas en todos los centros y divida espacios en Urgencias para evitar el contagio cruzado por enfermedades respiratorias.