Rodrigo Abad Vargas conoció el 'gusanillo' de la literatura a los 11 años, cuando un verano descubrió entre los libros de su hermana 'La casa de Bernarda Alba'. Desde entonces, este joven de 28 años no ha parado de escribir, crear y contar historias pero a pequeña escala.
Su carrera artística está compuesta por cuatro poemarios, tres novelas cortas, una antología de relatos y tres cuentos infantiles. Todos estos trabajos han visto la luz gracias a la autopublicación menos 'Al caer la nieve', su última fábula ilustrada que tiene como tema principal la amistad.
Rodrigo, natural de Mora, estudió periodismo y fue en el último año de carrera donde se le ocurrió escribir literatura infantil. "Nos pidieron realizar un proyecto transmedia y decidí hacer una web sobre literatura infantil. Y a partir de aquí fue uno detrás de otro".
Aunque está recomendado para niños y niñas de 8 años lo cierto es que "es un libro que pueden disfrutar todos" apunta el joven autor, que asegura que escribe cuentos con temáticas que a él le hubiese gustado leer. La historia es una fábula que habla de dos amigos que se separan por un malentendido, "algo que ocurre en todas las etapas de nuestra vida, pero que como también trata sobre las amistades verdaderas, pues es algo que vale para cualquier edad", asegura Abad Vargas.
La autopublicación: "Era la única manera que tenía de mostrar mi trabajo"
La obra de Rodrigo la componen once trabajos y diez de ellos son fruto de la autopublicación. "Era la única manera que tenía de mostrar mi trabajo y que no se quedara en el cajón", asegura el moracho. "Hay que apoyar a las editoriales y escritores independientes porque fomentan la bibliodiversidad".
El autor de 'Al caer la nieve' muestra la frustración de que editoriales de renombre "apuesten por libros de influencers que cuentan historias que no les pertenecen y que no tienen la visión de expresarlas bien".
Esta situación le lleva a preguntarse el "porqué la historia ajena que escribe alguien que muestra su vida en redes sociales vale más que la mía", dice Rodrigo que precisa ser "un escritor independiente y desconocido". No en vano, muestra también su objetividad y, asegura que su apuesta "es muy complicada".
"Si no eres un niño de 8 años o no eres un padre que se preocupa por las lecturas de su hijo y le compra el libro para leerlo en familia, el público es muy reducido", matiza.
Lo "difícil" de compaginar el periodismo y la escritura
Hasta el momento, Rodrigo solo había hecho colaboraciones digitales pero, desde hace seis meses ejerce como periodista -en elDiario.es Castilla-La Mancha- y asegura que su inspiración literaria "ha bajado". "El estar redactando artículos, noticias y otro tipo de textos hace que cuando quiera dedicarme a mi hobby no tenga tanta iniciativa".
Ahora, su mente está centrada en el periodismo y confía en que llegue el momento de "estar preparado y volver a escribir". "Todo son fases. Ya me ha pasado con anterioridad de estar meses o incluso un año sin poder continuar una historia o algún proyecto que tengo en mente o en el que estoy trabajando", subraya el escritor.
Mientras consigue compaginar sus dos pasiones, el joven emprendedor sigue teniendo proyectos en mente. El "más avanzado" es una novela de ficción histórica ambientada en Bretaña e Inglaterra del siglo XIV.
A lo largo de estos años, el moracho ha conseguido forjar su propio estilo, y confirma que la lectura es "fundamental" para todo aquel que quiera iniciarse en el mundo de la escritura. "Todo el mundo puede escribir historias pero llegar a contarlas bien solo se consigue con trabajo constante".