
Pruebas de un autobús eléctrico en Toledo / Foto: Ayuntamiento
En estos últimos días del año se está probando en Toledo uno de los autobuses 100% eléctricos con los que se plantean sustituir a diez de gas natural que cumplen su ciclo de funcionamiento a finales del próximo año 2022.
Se trata de uno de los modelos que se fabrican en la compañía Irizar, ubicada en Gipuzkoa, que la alcaldesa, Milagros Tolón, visitó el pasado mes de noviembre para conocer estos autobuses urbanos eléctricos con el objetivo de comenzar su incorporación a la flota municipal a principios de 2023.
"En nuestra apuesta por tener una ciudad más sostenible, moderna y eficiente, estos días vamos a probar por las calles de Toledo un autobús urbano eléctrico para comprobar su comportamiento y prestaciones y si se adapta a las necesidades del servicio", ha explicado Tolón.
El objetivo es valorar las opciones que más se pueden ajustar a las características orográficas de la ciudad así como contrastar el rendimiento de estos vehículos y sus ventajas. De esta forma, el Ayuntamiento apuesta por el uso de nuevas tecnologías más limpias, modernas y sostenibles para tener una ciudad, a su vez, más habitable y libre de humos.
Pérez del Pino ha tenido ocasión de probar este modelo de autobús en compañía de representantes de Unauto (Grupo Ruiz) e Irizar y recorrer algunas de las vías por las que transitará hasta el próximo 10 de enero, concretamente a través de las líneas 62 (Zocodover-Benquerencia sur), línea 5 (Zocodover-Santa Bárbara) y línea 91 (Benquerencia-Buenavista).
Características técnicas
Este vehículo denominado i-Etram está propulsado por motores eléctricos de la marca Siemens y ha sido fabricado por la carrocera Irizar con sede en Ormaiztegi (Guipúzcoa). Se trata de un autobús con una moderna estética de 12,16 metros de longitud, 2,55 metros de ancho y 3,38 metros de alto con un suministro de energía de 10 pack de baterías de litio ion con capacidad de carga de 350 kw.
Está equipado de rampa eléctrica y tiene tres puertas para facilitar el acceso y bajada de pasajeros con un aforo de hasta 70 personas (29 sentadas, 39 de pie y dos personas con movilidad reducida). Además, las butacas antivandálicas son de policarbonato y acero, permitiendo una fácil limpieza, desinfección y mantenimiento.
Asimismo, el sistema de iluminación es led, las barras asideras están dotadas de tomas USB para la recarga de dispositivos móviles y el equipo de climatización está equipado con un sistema ECO de alta capacidad de renovación del aire interior del vehículo.

Pruebas de un autobús eléctrico en Toledo / Foto: Ayuntamiento
Finalmente, cabe destacar las elevadas prestaciones que ofrece en cuanto a seguridad ya que dispone de cámaras retrovisores que eliminan los espejos exteriores, cámaras perimetrales de 360 º, sistema detector de antifatiga del conductor, detector de aproximación de viandantes, bicicletas o turismos, y un sistema de detección de obstáculos delanteros y control de salida de carril.
Esta iniciativa se suma a la reciente dotación al cuerpo de la Policía Local de Toledo de seis vehículos 4×4 híbridos y cero emisiones y un furgón eléctrico para el Cuerpo de Bomberos. Además, el Ayuntamiento viene aplicando medidas de eficiencia energética y sostenibilidad que han permitido reducir la huella de carbono en un 10 por ciento a través de la renovación del alumbrado público, la mejora de la depuración, la renovación de sistemas de calefacción en edificios municipales, la fibra óptica u la digitalización de trámites.
En nuestra apuesta por tener una ciudad más sostenible, moderna y eficiente, estos días vamos a probar por las calles de Toledo un autobús urbano eléctrico que podría suponer la alternativa a una partida de 10 autobuses de gas natural que cumplen su ciclo de vida próximamente. pic.twitter.com/O5wq41fpib
— Milagros Tolón (@milagrostolon) December 29, 2021