Entre las estampas más comunes del Toledo turístico es la foto con la famosa estatua de Cervantes, situada en el simbólico Arco de la Sangre, en la céntrica plaza de Zocodover. En la estatua, el escritor universal porta un libro, una representación de su carácter. Pero, ¿es este metálico retrato preciso? No, ni tampoco cualquiera de los otros que se conocen del hombre que llevó La Mancha a todos los rincones de este planeta.
Es la conclusión a la que ha llegado el investigador y archivero Francisco Javier Escudero, quien presenta este 23 de abril su libro 'Eso no estaba en mi libro de Miguel de Cervantes' (Almuzara, 2025) en la Biblioteca de Castilla-La Mancha. La fecha, por supuesto, no es casual: se celebra el Día Mundial del Libro, precisamente en recuerdo de la muerte del escritor complutense.
La efeméride sirve para desentrañar los secretos que todavía rodean la figura de este hombre, que ofreció a través de su literatura una historia que ha resonado desde Bombay hasta Santiago de Chile. Escudero afirma que a pesar de que no es un especialista "puro" de Cervantes, sí lleva más de quince años investigando su entorno.
"Me he dado cuenta de la cantidad de cosas que damos por sentadas de Miguel de Cervantes, en sus biografías y que no están apoyadas documentalmente", explica Escudero. De gran parte de la vida del escritor, señala, desde su juventud y su educación hasta sus amistades. "De eso no sabemos nada, o sabemos muy poco. Eso me animó a inscribir el libro", recalca.
Escudero ha trabajado en archivos durante más de una década. Pero eso no hace de la investigación un proceso más sencillo. "La verdad y la realidad es que es muy complicado, son miles de horas y euros. Eso es lo que cuesta investigar", resalta. Escudero habla de la "paleografía" de los textos de siglos atrás, de la minuciosa labor de ir hoja por hoja, descifrando, escudriñando en una aventura solitaria a través de nuestra historia. "Olvídate de Google, de internet y de la inteligencia artificial", advierte.
No es que no se sepa nada de Cervantes. "Muchas cosas ya se conocen del Cervantismo, evidentemente. Pero hay muchos factores que es complicado que se conozcan, como que todos los retratos que hay suyos son falsos. Todos los retratos que se conservan", asevera.
"Siempre hablamos del Cervantes judeoconverso, del Cervantes que tenía un estrés postraumático tras el cautiverio. Pero a mí lo que más me ha sorprendido es que hay muchísimo má de autobiografía en su obra de lo que se ha dicho", reflexiona Escudero. Más allá del "mito" creado alrededor del escritor, que se ha ido formando en base a "mantras" que se repiten sin césar, las palabras que han recorrido el mundo hablan también de su historia personal.
Escudero lo ejemplifica en su relación con los personajes femeninos que hay en su obra. "Desde el primer momento todos hemos sido conscientes de la gran importancia de los personajes femeninos y las historias de mujeres en su obra. Esto tiene que ser autobiográfico sí o sí, dada su realidad palmaria", escribe el investigador en 'Eso no estaba en mi libro de Miguel de Cervantes' y cita el discurso feminista de Marcela en el Qujiote.
Yo nací libre, y para poder vivir libre escogí la soledad de los campos. Los árboles de estas montañas son mi compañía, las claras aguas de estos arroyos mis espejos; con los árboles y con las aguas comunico mis pensamientos y hermosura"
La apuesta del investigador es llegar al Cervantes "más personal, más íntimo". "Es curiosísimo que de un personaje que se ha estudiado tanto, que se escriben libros todos los años, se pueda saber algo más. Pues resulta que podemos saber qué pensaba de su rey, de su reina, de los moriscos, de las campañas que se hacían en el norte de África y en Portugal. De lo que pensaba de su entorno cuando pasó por Toledo y por Sevilla. Es algo curioso, realmente", explica Escudero.
Y escribe en su investigación: "Los refranes, las consejas, las historias de calle que escuchó en Toledo, en Valladolid, en Extremadura también están ahí esperando a que los archivos las devuelvan a la vida. Los hechos reales de los donnadies, los cuchicheos orales convertidos ya en mitos también forman parte de su propia leyenda".

Grabado de un retrato de Miguel de Cervantes Leben und Thaten des scharfsinningen edlen Don Quixote von la Mancha (Otto Hendel) | Biblioteca Nacional de España
"Este tipo de cosas no se han planteado, que Cervantes volcara tantas cosas de su personalidad en sus obras. Entonces, muchas de ellas se han perdido", reseña Escudero, que pone de ejemplo la rebelión de la corona de Aragón que describe en su obra 'Las dos doncellas' de 1613. "La segunda parte es una fabulación de esta rebelión, contra el rey", apunta el investigador como reflejo de las inclinaciones políticas de Cervantes.
Mujeres empoderadas
Otro ejemplo es la narración en 'La gitanilla' que, contrario a lo que "todo el mundo piensa" es realmente, para el investigador, un "ataque directo" contra Lope de Vega y su entorno. "Prácticamente todos sus personas son reales, de su entorno sevillano o toledano, y toda esta elección tiene mucho que ver con sus circunstancias personales y sus vivencias, algo que le ha influenciado mucho más que su cautiverio, en mi opinión", asevera Escudero.
"Toda su narrativa está llena de mujeres fuertes e independientes", ejemplifica finalmente el investigador. Algo que, por supuesto, viene de una vida rodeado de ellas. Por una parte, por la cantidad de campañas bélicas a las que solo acudían los hombres. "Pero en el caso de Cervantes, era una cuestión de nacimiento. En la familia de su abuela, de los ocho hermanos seis eran mujeres. Ya había más mujeres por nacimiento y es lo mismo que le ocurre cuando llega a Valladolid, donde está prácticamente rodeado de mujeres", asevera.
El escritor se movía entre sus hermanas, sus amigas -como es el caso de Juana Gaitán que llegó a vivir en Esquivias-, o su sobrina. "Este universo femenino se refleja muchísimo en su obra, muchísimo. No solo Marcela era libre, muchas de ellas. La Gitanilla es una mujer evidentemente empoderada. Lo es también la 'Ilustre fregona', una mujer que lucha por su destino y no acepta lo que le dan", concluye el investigador.
Todo lo que podemos saber sobre el autor universal está en sus propias obras, de las que aún queda mucho por conocer. Y así lo resume Escribano en las últimas páginas de su investigación. "Es un repaso a todo lo que pensamos que fue y dejaba de ser. Tenemos su última voz. La vida pasando delante de sus ojos cuando ésta se apaga".