El municipio toledano de Segurilla está "preocupado" por el posible aumento de la capacidad de una explotación ganadera porcina que se sitúa a poco más de un kilómetro del núcleo urbano y que está a la espera de conseguir una evaluación de impacto ambiental ordinaria favorable para doblar su capacidad de 1.990 plazas de cerdos de cebo a 3.980. Una actuación sobre la que la Junta ya puso reparos y que ha estado sometida a información pública durante el mes de julio, a la que los interesados han podido presentar alegaciones.
Así lo manifiesta María Martín, concejala de IU en el Ayuntamiento de Segurilla, que apunta "al desconocimiento de la situación de un proyecto que se presentó ante la Junta", que "solicitó a la promotora a finales del año pasado que se subsanaran diferentes aspectos del proyecto que no cumplían con lo establecido en las normas, así como otros defectos".
Entre los criterios que la Junta reflejó en la formulación de impacto ambiental para la ampliación de esta granja, que publicó en el Diario Oficial de Castilla-La Mancha (DOCM) en noviembre del pasado año, se apuntaba que la ubicación del proyecto no quedaba "convenientemente justificado". En este sentido, la Viceconsejería de Medio Ambiente indicó que "no está asegurado el riesgo de contaminación de acuíferos, del suelo y del subsuelo de estas áreas" o que, también, podría producirse "una cierta alteración de la calidad del hábitat" en zonas de importancia de especies como el águila imperial o el buitre negro.
Con esto, la concejala explica que son "muchos los vecinos y vecinas de Segurilla que están manifestando su preocupación por esta posible ampliación, ya que con la actual situación, ya son numerosos los perjuicios que la población aguanta por la existencia de esta industria". "Malos olores, tráfico pesado de purines y animales, y otras situaciones, tienen a muchos segurillanos y segurillanas cansados y frustrados", asegura.
La concejala también critica "la poca información ofrecida y preocupación" que, a su juicio, "parece mostrar el alcalde de Segurilla, Pablo Barroso, quien afirma que "no ha dado muestras de preocupación o interés ante una situación que inquieta a la población de Segurilla de manera considerable".
En contra de la implantación de grandes centros de cría
En rueda de prensa junto a Martín, el coordinador provincial de IU Toledo, Mario García, insistió en el rechazo que genera en la formación de izquierdas, "la implantación de grandes centros de cría y cebo de animales para consumo cárnico, con el beneplácito del gobierno de Emiliano García-Page, el cual aporta importantes sumas económicas para el fomento de estas macrogranjas en forma de subvenciones".
Macrogranjas que, afirman, "no generan prácticamente empleo, sino todo lo contrario: en muchos casos pudieran propiciar la eliminación de dicho empleo entre el colectivo de pequeños ganaderos, ya que estos se pueden ver abocados al cierre por la baja rentabilidad obtenida, en base al precio del producto que es marcado por los grandes productores, que con menos mano de obra generan más beneficios".
"Mayor producción y menos mano de obra, a costa de criterios de cría y engorde que pueden suponer una merma en la calidad de la carne por diferente condiciones. Eso sin contar con las situaciones a las que pudieran estar sometidos los animales", "Es un modelo de cría animal que recibe premio por parte de la Junta en forma de grandes subvenciones de dinero público", asevera García.
"La macrogranjas no son el modelo de desarrollo y creación de empleo acertado para nuestra tierra, ya que ni fijan la población en los pueblos, ni aumenta el número de trabajadores en esta industria; más bien lo contrario", remarcó García. que alertó también de la proliferación de este tipo de industria "pudiera generar una acumulación de purines que tenga difícil manera de gestionar. Unos purines que por diferentes circunstancias podrían afectar a los acuíferos y a zonas con cierto valor medioambiental".