El avance del nuevo Plan de Ordenación Municipal (POM) de Toledo se presentará el próximo jueves 2 de junio, en una Comisión de Urbanismo extraordinaria, un proyecto que fijará las líneas de un modelo de ciudad "sostenible, saludable, segura, social y e inteligente -'smart city'-". Con él se enterrará de manera definitiva la posibilidad de construir en la Vega Baja.
"Lo primero que está recogido en el POM es que no se puedan construir viviendas en los tres Bienes de Interés de Cultural (BIC) -Vega Baja, Circo Romano y Cristo de la Vega-" que se localizan en este enclave. Así lo ha manifestado la alcaldesa de Toledo, Milagros Tolón, durante la intervención que ha realizado en el 'Espacio Reservado' organizado por encastillalamancha.es.
Además, ha destacado que, tras el convenio sellado con la Junta y el Gobierno de España para proteger la Vega Baja, van a "recuperar el parque arqueológico" con el objetivo de "devolver a la ciudadanía" el uso de "un espacio que lleva muerto mucho tiempo".
Para ello, indica que van a crear "sendas peatonales" que sirvan "para conocer los restos arqueológicos, para hacer deporte o disfrutar del paisaje". Asimismo, quieren dar "un uso lúdico" al espacio con un campo de fútbol integrado que asegura que han comprobado que "se puede hacer respetando los restos".
De otro lado, ha indicado que van a llevar a cabo una zona de aparcamiento para facilitar el acceso al parque arqueológico y, también, pondrán en marcha un programa de puesta en valor del Circo Romano con la colaboración de la Universidad de Castilla-La Mancha que incluye visitas digitalizadas de 360º.
Entre 12.000 y 18.000 viviendas para "superar los 100.000 habitantes"
Tolón también ha avanzado que este nuevo POM recogerá la disponibilidad de suelo para poder edificar "entre 12.000 y 18.000 viviendas" en la ciudad. En este sentido, ha manifestado que el objetivo es que la ciudad pueda "superar los 100.000 habitantes" en los próximos años -actualmente cuenta con alrededor de 86.000-, algo que "supondría muchas ventajas para obtener ayudas económicas".
En este sentido, se ha referido a la regeneración urbana que quieren llevar a cabo en los barrios de Palomarejos y Santa Bárbara. En el primero ha recordado la intención de construir viviendas en la parcela en la que se encuentra actualmente el cuartel de la Guardia Civil -una vez estén disponibles las futuras instalaciones en La Peraleda-, así como en la del antiguo hospital.
"Estamos en conversaciones con el ministro de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones, José Luis Escrivá, para que cuando se desaloje el Virgen de la Salud -donde todavía hay laboratorios en funcionamiento- podamos firmar un convenio para hacer de ese solar de 20.000 m2 viviendas, así como también darle uso dotacional y terciario", ha explicado la alcaldesa.
Respecto al barrio de Santa Bárbara ha destacado un proyecto financiado casi exclusivamente con fondos europeos para rehabilitar con criterios de sostenibilidad diversos bloques de viviendas, principalmente en la zona de las calles de las Vírgenes.
Cuestionada por los plazos que manejan para que la ciudad pueda superar la barrera de los 100.000 habitantes, Tolón se ha mostrado cauta pero sí ha solicitado pedimos a las administraciones que "tienen suelo" de uso residencial -en una alusión velada a la Junta- que "lo pongan en marcha para crear viviendas". "No queremos que nuestros jóvenes se vayan fuera", ha agregado.
Regulación de apartamentos y viviendas turísticas
También ha destacado que el avance de este POM incluirá la regulación de apartamentos y viviendas de uso turístico (VUT), que afectan principalmente al Casco Histórico, pues quieren "hacer compatible el uso residencial y turístico" en el histórico barrio toledano, donde ha recordado distintas líneas de ayudas puestas en marcha por el Consorcio para rehabilitar viviendas.
"Los ayuntamientos no tienen competencias turísticas pero sí urbanísticas. Si hay mil viviendas vacías y llega un fondo y se queda con ellas podría ocurrir -que las convierta en apartamentos turísticos o VUT-. Eso se va a definir en el POM y se va a controlar. Tienen que existir pero hay que controlarlos y regularlos para que no haya una sobredimensión de apartamentos turísticos", ha manifestado al respecto.
En definitiva, la alcaldesa ha resaltado que "hay mucha gente que trabaja en Toledo que no vive aquí y hay que atraerla". "Para ello es importante traer industria y tener viviendas", ha refrendado sobre uno de los objetivos que se marcan con este avance del POM, un documento que será sometido a un proceso de participación ciudadana y social tras su presentación.
Recuperación de las riberas del Tajo
Otra de las características principales del avance del POM es la apuesta por el río Tajo como "eje vertebrador" de la ciudad y "zona de encuentro". Para ello serán importantes varios proyectos, algunos ya con fondos comprometidos por el Gobierno de España a través de Europa.
Entre ellos, ha destacado cuatro proyectos concretos: la pasarela peatonal que harán en el nuevo puente de Alcántara -que saldrá pronto licitación-, la reforma de la senda ecológica desde la Fábrica de Armas hasta el mencionado puente, la rehabilitación el antiguo puente ferroviario entre Azucaica y Santa Bárbara para convertirlo en una vía verde y la renaturalización de las riberas en La Peraleda.
Itinerarios biosaludables
Ampliación del Polígono industrial
El avance del POM también recoge la ampliación prevista de 3,6 millones de m2 de suelo en el Polígono industrial, dirigido a "empresas vinculadas a la innovación y el desarrollo tecnológico". "La economía de la ciudad no puede estar basado solo en el sector turístico, es importante diversificar", ha mencionado en este sentido. Además, durante su intervención ha anunciado también una nueva fase de obras desde la calle Río Jarama, arteria principal del Polígono industrial, hasta la avenida del Río Ventalomar.
Con este documento inicial, tras la anulación del POM del 2007 -que se hizo efectiva en el año 2018-, el Ayuntamiento quiere cohesionar "una ciudad dispersa y poco sostenible" que tiene distancias "de hasta casi 20 kilómetros de punta a punta", lo que repercute "en la gestión de los servicios públicos y en el día a día de la ciudadanía".