La Mesa General de Negociación del Ayuntamiento de Toledo ha abordado este viernes la modificación de la Relación de Puestos de Trabajo (RPT), la convocatoria de procesos selectivos para la estabilización del empleo temporal, la distribución de los fondos adicionales 2020 y el diseño futuro de un Plan de Teletrabajo, una vez superada la situación de pandemia.
En este último punto, la concejala delegada de Hacienda, Patrimonio, Régimen Interior y Transparencia, Mar Álvarez, que ha presidido la mesa, ha expuesto algunas de las premisas enmarcadas en la propuesta para la ordenación del trabajo no presencial (teletrabajo), una necesidad que esta crisis ha evidenciado y que permitirá de cara al futuro contar con una norma que regule el teletrabajo, desde las premisas de la mejora de los servicios públicos, la seguridad y la mejora de las condiciones de los trabajadores municipales.
Por ello, entre las bases propuestas para su debate, se han planteado algunas como: el teletrabajo será costeado por la Administración, que determinará las características técnicas de los equipos informáticos. Además, la propuesta define el carácter de este sistema como “voluntario y reversible a criterio de la Administración o del trabajador”, en el primer caso por razones debidamente justificadas y, en el segundo, por causas excepcionales e imprevistas tras el acuerdo de prestación.
Tanto la Administración como el trabajador deberán asumir un compromiso específico de mantenimiento del teletrabajo durante un periodo mínimo de un año. Será imprescindible la evaluación de los servicios prestados en régimen de teletrabajo y se consensuará un Plan Individual de Prestación.
Según ha mantenido la edil responsable, “desde el inicio de esta pandemia, este Gobierno local ha sido consciente de la necesidad de adaptar las condiciones laborales de los empleados municipales a esta situación. Siempre hemos tenido como objetivo garantizar la seguridad para los empleados y seguir ofreciendo la mejor atención posible al ciudadano”.
No obstante, ha recalcado la edil “una vez comprobados los beneficios que el teletrabajo aporta tanto para la Administración como para el empleado -desde el punto de vista de la conciliación familiar y del avance y modernización de las administraciones-, es el momento de empezar a sentar las bases de esta nueva modalidad de trabajo una vez superada la pandemia”.
Finalmente, ha mantenido, “ahora, es momento de negociar y contemplar las aportaciones de los empleados y desde el consenso y el diálogo apostar por un servicio público, moderno y de calidad”, ha finalizado.