El Ayuntamiento de Toledo ha celebrado la Comisión de Movilidad para analizar la implantación de la Zona de Bajas Emisiones (ZBE) que se prevé que entré en vigor en diciembre de 2025 y que afecte solo al Casco Histórico de la ciudad. Los grupos municipales de la oposición -PSOE e IU-Podemos- pueden presentar alegaciones hasta el día 25 de agosto, y en este caso han expresado una idea muy clara: que aprobar este plan "por obligación" y por no perder las subvenciones es "un error".
La principal reivindicación de la oposición es que PP y Vox no aborden los efectos del cambio climático en la movilidad por "convicción" y se limiten, tal y como defienden, a cumplir con los mínimos establecidos por la ley. Además, reprochan que la regulación de la ZBE solo afecte al Casco Histórico y se obvie su implantación en otros barrios de la ciudad.
También critican la aprobación urgente que han realizado del Plan de Movilidad Urbana Sostenible (PMUS) -documento necesario para implantar la ZBE y que el propio Gobierno local cree que está "incompleto"- aunque en este caso por distintas razones. El PSOE recrimina que hayan dado luz verde al mismo a destiempo, dos años después de concluir su redacción, mientras que IU pone en duda que sea un documento válido para completar el proyecto de ordenanza de ZBE.
PSOE: "No hay voluntad de lucha contra el cambio climático"
"No trasciende ninguna voluntad ni de la lucha contra el cambio climático, lo cual al menos una parte del Gobierno municipal -de PP y Vox- no cree, ni por supuesto una apuesta por la salud de los ciudadanos", ha trasladado en declaraciones a los medios el concejal del PSOE Francisco Rueda. Así, considera que la regulación propuesta de la ZBE "no es una política ambiental sino un castigo a vecinos, trabajadores y pequeñas empresas del Casco Histórico”.
En este sentido, indica que la ZBE, a su juicio, "debería fomentar nuevas formas de movilidad", apostando por "el transporte público, peatonalizar, vías ciclistas o la electrificación del parque móvil, tanto los vehículos de empresas como los vehículos públicos del propio Ayuntamiento". "Y también favorecer a las personas, a los privados, con medio de bonificaciones en la hora o en el impuesto de circulación la adquisición de estos vehículos", agrega.
Además, indica que el texto no incluye incentivos reales: no contempla bonificaciones en la tasa de aparcamiento ni en el impuesto de circulación para los vehículos no contaminantes, como sí hacen la mayoría de las ciudades que han implantado zonas de bajas emisiones.
Izquierda Unida: "No pensamos en el futuro"
De su lado, el concejal de IU-Podemos, Txema Fernández, reprocha que la nueva ordenanza está enfocada en el uso de vehículos privados. "Hemos preparado un plan de movilidad para el que invertiremos casi siete millones de euros para intentar que el Casco Histórico de Toledo no tenga emisiones, sin importarnos si éstas se producen en el resto de barrios de la ciudad". "No pensamos en el futuro”, lamenta el edil.
Además, ha añadido que si el Casco Histórico toledano "es una isla de calor, es porque es el barrio con menos árboles en la ciudad de Toledo". Igualmente, ha adelantado que en el pleno del viernes 25 van a presentar "una moción para que esos posibles 15 millones de euros que va a pedir el alcalde, Carlos Velázquez, para hacer el puente de la ciudad de Toledo, se dediquen a fomentar, mejorar e incrementar el transporte público de la ciudad".
El PP abre la puerta a ampliar la ZBE al resto de la ciudad
Por su parte, el concejal de Movilidad, Transportes, Interior y Personal, Iñaki Jiménez, ha insistido en que "no hay margen" ahora para aprobar el PMUS e implantar la ZBE, que asevera que es "un proyecto mínimos" que "se puede ir ampliando al resto de la ciudad". "Hemos hecho especial hincapié en el Casco Histórico porque vamos a preservar y proteger los monumentos históricos. También vamos a peatonalizar más la zona y a evitar que los vehículos estén rondando por la ciudad", ha dicho.
En este sentido, apunta que son "17 autobuses los que suben cada día a Zocodover 593 veces en total", algo que ha tachado de "inviable" no solo por la contaminación sino por cómo afecta también al pavimento. Asimismo, ha afirmado que siente "vergüenza ajena" por las declaraciones del PSOE, ya que "si hubieran tenido ellos voluntad política, hubieran sacado el PMUS, porque tenía que estar hecho en 2023".