La lluvia de estrellas de las Cuadrántidas ha producido en los últimos días una inmensa cantidad de estrellas fugaces que han convertido el cielo en un espectáculo que han conseguido captar desde el Complejo Astronómico de la Hita, en Toledo. La máxima intensidad de esta lluvia de estrellas se produjo en la madrugada del 3 al 4 de enero, cuando un impresionantes número de estrellas pudieron observarse junto a algunas bolas de fuego prácticamente desde todo el país.
El fenómeno fue registrado por los detectores que la Universidad de Huelva opera en el Complejo Astronómico de La Hita (Toledo) y en los observatorios astronómicos de Calar Alto (Almería), La Sagra (Granada), Huelva y Sevilla. Estos detectores trabajan en el marco del Proyecto SMART, cuya finalidad es monitorizar continuamente el cielo con el fin de registrar y estudiar el impacto contra la atmósfera terrestre de rocas procedentes de distintos objetos del Sistema Solar.
El análisis llevado a cabo por el investigador principal del Proyecto SMART, el Profesor José María Madiedo (Universidad de Huelva), indica que la máxima actividad de las Cuadrántidas se alcanzó en torno a las 3:30 (hora peninsular) de la pasada madrugada. En ese momento se pudieron observar, en condiciones ideales y bajo un cielo totalmente despejado y libre de contaminación lumínica, unas 100 estrellas fugaces a la hora.
Colisión de pequeños fragmentos de roca de un cometa
La lluvia de estrellas de las Cuadrántidas se produce como consecuencia de la colisión contra la atmósfera terrestre de pequeños fragmentos de roca desprendidos de un cometa. La mayoría de estos fragmentos son tan pequeños como un grano de arena y producen estrellas fugaces al quemarse en la atmósfera a unos 144 mil kilómetros por hora. Los fragmentos de roca de mayor tamaño (más grandes que un guisante) son los que generan bolas de fuego como las observadas la pasada madrugada.
Las Cuadrántidas pueden verse todos los años entre el 28 de diciembre y el 12 de enero. Su máxima actividad en 2019 ha tenido lugar en la noche del 3 al 4 de enero, momento en el que miles de estrellas fugaces han podido ser registradas desde los distintos observatorios implicados en el proyecto SMART. Las Cuadrántidas se caracterizan también por experimentar un brusco descenso de su actividad a partir del día 4, por lo que el número de estrellas fugaces que podrán verse durante las próximas noches será muy bajo.