El Gobierno local de Toledo ha dado un paso definitivo este martes para poder gestionar el creciente flujo de visitantes a la ciudad al aprobar el proyecto de la nueva ordenanza municipal para la regulación de la actividad turística y la convivencia ciudadana.
El borrador de la misma, al que ha tenido acceso este medio, establece una serie de directrices -y sanciones por su incumplimiento- que llevaban meses e incluso años debatiéndose y que llegan al punto de que la Junta de Gobierno Local pueda establecer, de manera motivada, límites de aforo y circulación en los ejes turísticos y sitios de interés de la capital regional.
Así lo recoge uno de los artículos que aborda la gestión y ordenación del turismo, en el que se enumeran varias medidas en materia de circulación peatonal en la vía pública. Entre ellas, también se plantea establecer recorridos alternativos para acceder a la visita de la ciudad desde el acceso de una zona menos saturada.
También recoge el documento que, en calles estrechas, los grupos deberán desplazarse en fila o en formación que minimice la ocupación del espacio público. Además, insta a facilitar siempre el paso a personas con movilidad reducida, asegurando que no se vean bloqueadas por la presencia del grupo, y a no dificultar el tránsito de vehículos autorizados.
Del mismo modo, apunta a facilitar el paso a peatones que porten carros de la compra, sillas de bebé u otros elementos de apoyo, evitando bloqueos o interrupciones prolongadas.
Grupos de hasta 30 personas
Otra de las medidas más significativas de esta normativa establece limitaciones al tamaño de los grupos turísticos en zonas de alta concentración peatonal y su desplazamiento por el Casco Histórico.
En concreto, la ordenanza prohíbe el tránsito de grupos turísticos de más de 30 personas, incluyendo al guía, en la calle Hombre de Palo, la plaza del Ayuntamiento y el Pasadizo de Balaguer, que una la mencionada plaza con la calle Ciudad.
No obstante, la Junta de Gobierno Local podrá modificar estas zonas basándose en criterios de afluencia peatonal y seguridad. Y añade que, excepcionalmente, se podrán otorgar autorizaciones especiales justificadas.
Asimismo, el borrador, que el Gobierno de PP y Vox ha dado a conocer hoy también a los grupos municipales de PSOE e IU-Podemos, indica que queda expresamente prohibido que los grupos turísticos obstruyan cruces de vías públicas, zonas de paso peatonal y entradas/salidas de comercios, viviendas y edificios públicos.
Sistemas de audio individualizados y acreditaciones
La normativa también impone requisitos específicos para el turismo guiado. En concreto, la nueva normativa municipal prevé prohibir el uso de altavoces o megáfonos y establece la obligación de usar sistemas de audio individualizados para grupos superiores a 30 personas o para actividades realizadas después de las veintitrés horas (excepto grupos escolares menores de 16 años).
También apunta a la responsabilidad del guía en el cumplimiento de la ordenanza puesto que recoge que, como responsable del grupo, también puede ser sancionado. Entre sus obligaciones, se señala que han de estar debidamente acreditados y contar con formación específica, llevando visible su carné oficial.
De la misma manera, los guías turísticos deberán informar a sus grupos sobre la obligación de mantener limpio el entorno urbano, evitando arrojar residuos fuera de los contenedores habilitados.
Respecto a loa 'Free Tours', la ordenanza traslada que esta actividad se sujeta a la normativa de la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha. Así, "se prohíbe el uso de objetos o soportes materiales que actúen como publicidad comercial para atraer la atención en espacios públicos, en línea con las normas municipales de publicidad y rótulos".
Regulación del transporte turístico
Otro de los capítulos de la ordenanza -que contempla un total de 5 capítulos y 27 artículos- aborda la intervención municipal en las actividades de transporte turístico, reconociéndolas como actividades económicas sujetas a regulación debido a su especial intensidad en el uso del dominio público y su impacto en la movilidad.
En este punto, indica que la Junta de Gobierno de la Ciudad podrá establecer limitaciones en el estacionamiento, parada y circulación de transportes como trenes turísticos, autobuses turísticos y otras tipologías de vehículos utilizados con fines turísticos. Asimismo, se fijará un número máximo de autorizaciones demaniales para cada categoría de vehículo, considerando la morfología de la ciudad y la movilidad.
Sanciones
Para el cumplimiento de todas las medidas planteadas, la ordenanza recoge igualmente un régimen sancionador con infracciones leves -hasta 750 euros-, graves -de 750 a 1.500 euros- y muy graves -de 1.500 a 3.000 euros-. Se consideran criterios de graduación la intencionalidad, la trascendencia social, los perjuicios causados, la reincidencia y el beneficio obtenido, entre otros.
Según se precisa, constituirán sanciones de carácter leve el incumplimiento de las medidas relativas a la limitación de los grupos turísticos en zonas de alta concentración peatonal, los requisitos relativos al turismo guiado o el régimen jurídico de la actividad de 'Free Tours', así como las planteadas en movilidad y transporte turístico.
Por su parte, serán consideradas infracciones de carácter grave el incumplimiento o inobservancia de las limitaciones en el estacionamiento, parada y circulación de los vehículos con autorización o la comisión de tres faltas leves en el plazo de un año.
Y, por último, constituirá infracción de carácter muy grave el ejercicio de la actividad regulada -con los límites establecidos en la ordenanza de Movilidad- para el transporte turístico sin la correspondiente autorización demanial, o la comisión de tres faltas graves en el plazo de un año.
Consejo Local de Turismo
Finalmente, la ordenanza crea el Consejo Local de Turismo como un órgano de participación y asesoramiento al Ayuntamiento en materia de turismo. Este consejo, presidido por la Alcaldía de Toledo, estará compuesto por representantes de grupos municipales, organizaciones empresariales del sector turístico, la Federación de Asociaciones Vecinales y otras entidades relevantes.
Su finalidad es fomentar el diálogo, impulsar una estrategia de promoción coordinada, promover un turismo de calidad integrado en el modelo de ciudad y buscar el desarrollo de un turismo sostenible y accesible.
En definitiva, esta ordenanza, que continuará su tramitación hasta la aprobación de la misma, surge de la necesidad de abordar problemas como la masificación de personas y la contaminación acústica en ciertos lugares y momentos. El objetivo principal es garantizar la seguridad ciudadana, la correcta movilidad y mejorar la convivencia entre vecinos y visitantes, asegurando el libre ejercicio de derechos y libertades en el espacio público compartido.