El presidente de ASAJA en España Pedro Barato ha anunciado hoy que “va a haber movimientos en el sector del aceite de oliva como los hubo en Rioja con el vino y nadie se los creyó”, en referencia a las negociaciones que se están llevando a cabo entre grupos empresariales españoles y cooperativas, con el fin de comprometer toda la producción de estas a medio y largo plazo, en torno a los cincos años, a unos precios concertados.
Lo ha dicho durante la celebración de la cuarta edición de la Jornada NaturAceite 2024, organizada por elDiario.es en Castilla-La Mancha en la localidad toledana de Mora. Y ha señalado concretamente a la provincia de Toledo como uno de los sitios donde se están produciendo ya estos movimientos, “Hay que crear estabilidad, para evitar los sustos permanentes. Hay mecanismos suficientes”, ha manifestado.
Junto a ASAJA, las organizaciones agrarias UPA y COAG además de Cooperativas Agroalimentarias debatían sobre la crisis del campo y en particular sobre la situación del sector olivarero.
Para el presidente de UPA Castilla-La Mancha, Julián Morcillo el año 2023 fue “horrible” para un sector olivarero con campañas muy cortas en los dos últimos años y explotaciones que “se han ido al traste”, y por eso ha dicho entender “el cabreo y el volumen que han tomado las movilizaciones agrarias”, en los últimos meses.
¿Peligra el olivar tradicional del secano?, se planteaba durante la jornada. “No, y si lo hace es por los costes de producción” decía Barato. Francisco Redondo, responsable sectorial de COAG en Castilla-La Mancha, no cree que esté “en peligro de extinción”, pero la producción, reconoce, es muy baja. “Hay que asegurar esa producción y eso se hará si tenemos agua”. Entre sus preocupaciones está el aumento de producción en terceros países como Turquía, que llega hasta nuestro país y ha pedido “más control” por parte de las administraciones públicas “en la entrada de estas producciones a España”.
Para Ángel Villafranca, presidente de Cooperativas Agroalimentarias de España, “ahora estamos mucho mejor con perspectivas buenas en cereal, viñedo y olivar”, pero sostiene que “el principal problema son los costes de producción que están disparados en todos los sectores. Se han duplicado y ante caídas de producción, la rentabilidad es muy complicada”.
Ha destacado el “cierto enfado” en el sector porque, decía, “vemos como la sociedad no está sensibilizada con lo que está haciendo el sector agroalimentario. Las políticas europeas que se irradian no son las que vienen a poner en valor lo que hacemos todos los días”, lamentaba.
“Muchas veces se nos culpa y lo que intentamos es sobrevivir para alimentar a la ciudadanía”, incidía.
Sobre el sector del aceite de oliva Pedro Barato ha repetido en varias ocasiones que “no hay un problema de precios, sino de costes de producción, pero alguien está empeñado en atacar a los productos del sector agrario, como el aceite. Hay alguien interesado en echar leña al fuego”.
Barato pedía “reconvertir el olivar tradicional, aunque no todo”, aclaraba para asegurar que el sector tiene un “futuro muy, muy bueno”.
Francisco Redondo, responsable sectorial de COAG en Castilla-La Mancha alertaba de la escasez de aceite. “No hay, vamos a llegar a cero al principio de la próxima campaña”.
El agua y la rentabilidad del olivar
COAG sostiene que “hay que pensar en asegurar la producción de futuro”. No se iba muy lejos, para recordar la existencia de “un pantano muerto” en el entorno de la localidad toledana de Mora. “Es una infraestructura semi conectada con el Tajo. Exijo que se haga un estudio y obras para asegurar el agua. Y el agua, en vez de que vaya a Murcia que se quede aquí”.
Para Cooperativas Agroalimentarias, “España necesita una política de agua estatal. No tenemos mar y no podemos instalar desaladoras. Tenemos reservas en los acuíferos”, coincidía con UPA, que hay que “investigar”.
Villafranca también se ha referido al proceso para revisar las normas de explotación del trasvase Tajo-Segura. “Apoyaremos al Gobierno de Castilla-La Mancha. No para que el agua se vaya a Portugal sino para que venga a la llanura manchega, porque lo necesitamos. El resto es caer en demagogias y enfrentamientos políticos que no conducen a nada”.
Julián Morcillo de UPA cree que se necesita una política estatal del agua. “¿Estamos defendiendo los intereses de Castilla-La Mancha? Posiblemente no. Generamos recursos, pero no los conservamos”, lamentaba. También criticaba “la imposibilidad de hablar de agua” con el Ministerio para la Transición Ecológica y con el Gobierno de Castilla-La Mancha.
“Estoy muy harto”, decía Pedro Barato en relación al agua porque “desaprovechamos el plan hidrológico nacional en el que había dinero para hacer las cosas” y cargaba directamente contra la ministra para la Transición Ecológica Teresa Ribera, por poner “carga ideológica” a la cuestión del agua. “Un agricultor no puede ser un terrorista”. También criticaba a las confederaciones hidrográficas que, en su opinión, “se han convertido en agentes de la sanción. No puedo defender su labor”, decía.
La representatividad en el sector agrario
También se ha comentado durante NaturAceite 2024 el debate abierto sobre la posibilidad de cambiar el modelo de elección de quienes representan al sector primario. “Que no nos toque”, ha dicho Pedro Barato. “Si lo que se premia es dividir, pues rápidamente sacamos a ASAJA”, ha advertido.
“Es cierto que dividir la representatividad es un error. Lo que deberíamos atender es a tener organizaciones serias, que estemos a las buenas y las malas”, afirmó por su parte Julián Morcillo, de UPA, quien lamentó que tras las movilizaciones agrarias se haya tratado a los agricultores como si fueran “los responsables de las siete plagas”. “No es justo”, zanjó.
COAG se refería de soslayo a la reclamación de Unión de Uniones para celebrar elecciones al campo que abran el abanico de la representación agraria. Recordaba las movilizaciones semanas atrás y no ha obviado, sin citarlo, la división que le toca de lleno. “Hemos estado un mes de movimientos y se han reconducido porque los movimientos espontáneos no van a ningún sitio. Nos han comido el terreno, deben ser las entidades reconocidas que tengan representación”.
“A las elecciones europeas no le prestamos la atención que merecen”
También hoy se ha puesto el foco en las elecciones europeas del 9 de junio. “Son importantes y posiblemente no le prestamos la atención que merece” porque quedan numerosas cuestiones importantes en el tintero como “la situación del sector ganadero que atraviesa una crisis importante”, decía Morcillo.
UPA se muestra disconforme con la reforma de la Política Agraria Comunitaria (PAC) por su “calado ambientalista”. En su opinión, “los lobbys medioambientales no perciben el esfuerzo y el trabajo que hay detrás del sector agrario” y cree que “la Administración europea debe estar más cerca del sector que garantiza la alimentación”.
Pedro Barato, presidente de ASAJA España también se refería a las próximas elecciones europeas para reclamar “no bajar la guardia”. En su opinión, “la política europea debe ser ambiental pero también debe ser rentable porque si no, no será sostenible” y se muestra en desacuerdo con las 43 medidas propuestas por el Ministerio. “Es netamente insuficiente. Va más allá. Cree que ”hace falta cambiar el desaguisado de la política agraria común, para la agricultura no vale“ y se declaraba ”más europeísta que nunca“, frente a aquellos países que quieren dividir a Europa” o “jugar solos en la Champions League”.