Una mujer recoge papas en el campo español / Foto: Fademur
Hoy, 15 de octubre, como cada año, celebramos el Día Internacional de las Mujeres Rurales. Una fecha muy señalada en el calendario en el que felicitamos a todas las mujeres del medio rural español; pero sobre todo una fecha que adquiere especial relevancia en una región como la nuestra eminentemente rural (el 91% del territorio tiene esta calificación), en la que el papel de la mujer rural se erige como una de las palancas más importantes y estratégicas para el desarrollo y sostenimiento de la población en el medio rural a nivel regional. En definitiva, una fecha para celebrar, pero también para seguir llamando a la movilización de toda la sociedad para seguir trabajando en el noble objetivo de lograr la igualdad real y efectiva entre todos los hombres y mujeres de nuestro medio rural.
Desde Cooperativas Agroalimentarias Castilla-La Mancha seguimos comprometidos en fomentar y aumentar la presencia de mujeres tanto en la base social de nuestras cooperativas agroalimentarias como en los consejos rectores de las mismas. Aún estamos lejos de las ratios deseadas, pero lo cierto es que los resultados obtenidos hasta el momento nos permiten ser prudentemente optimistas. Desde el año 2010 a 2021 las mujeres asociadas a cooperativas en nuestra región crecieron un 5,8%, pasando de representar el 22,7% del total al 29,2%. De igual forma, en los consejos rectores la presencia de las mujeres aumentó de forma constante, pasando del 5,8% de consejeras en el año 2010 al 11,1% en el año 2021, esto es, un incremento de un 4,5%.
Pero nada es fruto de la casualidad y no en vano en Cooperativas Agroalimentarias Castilla-La Mancha venimos trabajando intensamente desde hace más de una década en la visibilización y empoderamiento de la mujer rural en el sector cooperativo agroalimentario, disponiendo para ello de manera permanente de una Comisión de Igualdad y un departamento técnico de Igualdad desde los que se impulsan numerosas acciones encaminadas a poner en valor el papel de la mujer en la agricultura, en el medio rural y, de manera especial, en la empresa agroalimentaria. Acciones fundamentalmente dirigidas a formarlas y potenciar sus habilidades de liderazgo transformador para facilitar su incorporación a los órganos de gobierno de nuestras cooperativas.
La presencia de las mujeres en nuestro sector cooperativo agroalimentario es fundamental para mejorar su competitividad y para seguir creciendo en un entorno empresarial complejo. Si bien es verdad que aún queda mucho por conseguir en este avance por la igualdad en el medio rural, a día de hoy solo podemos decir que el cooperativismo se siente orgulloso de nuestras mujeres rurales, de nuestras socias, de su trabajo, de su lucha y de su buen hacer demostrado desde hace décadas. Nada sería igual sin vosotras.
Feliz Día a las Mujeres Rurales.
