
Acto de la firma del contrato para la redacción del nuevo Plan de Ordenación Municipal (POM) de Toledo / Imagen: Ayuntamiento de Toledo
"Por fin llegó el momento". Son las primeras palabras que ha manifestado el concejal de Planeamiento Urbanístico, Florentino Delgado, en el acto en el que se ha escenificado la firma del contrato para la asistencia técnica con la que contará el Ayuntamiento de Toledo para la redacción del nuevo Plan de Ordenación Municipal (POM) que "tanta falta hace".
La rubrica la han llevado a cabo el alcalde, Carlos Velázquez, y el arquitecto José María Ezquiaga, administrador de la empresa Ezquiaga, Arquitectura, Sociedad y Territorio SL, adjudicataria de este contrato que se tuvo que licitar por segunda vez en esta legislatura -al quedar desierto el trámite en la primera ocasión- y que cuenta con un presupuesto total de 687.560,72 euros.
El contrato formalizado para redactar el nuevo POM, que también abordará la renovación del Plan Especial del Casco Histórico de Toledo (PECHT), establece una duración de 30 meses, contados desde la formalización del mismo, y divididos en cuatro fases de ejecución.
Según este planteamiento, la estimación para conseguir la aprobación inicial del documento llegaría en mayo de 2027, fecha en la que tendrían que celebrarse nuevas elecciones autonómicas y municipales, por lo que su aprobación definitiva se conseguiría ya en una siguiente legislatura.
"Si los plazos se cumplen, en esta legislatura tendremos esa aprobación inicial, que es el objetivo. Pero hay cosas que no dependen de nosotros", ha apuntado Velázquez, a quien le consta que por parte de la Junta "harán todo lo posible en la revisión de los informes" para que su tramitación se ajuste a los plazos previstos en el contrato.
En este sentido, remarca que han tenido en cuenta "el tiempo razonable" previsto para que la Junta -administración de la que depende la aprobación definitiva- pueda emitir sus informes a los documentos que se presenten del nuevo POM. "Pueden existir complicaciones pero en estos plazos se puede hacer. No es ninguna quimera. Ya hay trabajo avanzado porque conocen a nuestros técnicos, conocen el estudio, el despacho -de arquitectura-. Se puede hacer, vamos a por ello", ha agregado.
Cuatro fases
En concreto, se establecen cuatro fases: la primera consistirá en la elaboración de todos los documentos descritos en la fase inicial hasta la presentación ante el órgano ambiental de la documentación del borrador del Plan y el documento inicial estratégico. Tendrá una duración de ocho meses por lo que se alargaría hasta noviembre de 2025. Este primer plazo comenzará con la formalización del contrato y finalizará el día de la entrega del documento completo al Área de Urbanismo del Ayuntamiento de Toledo.
La segunda fase terminará con la elaboración de la redacción de la versión inicial del POM y la elaboración del Estudio Ambiental Estratégico para su sometimiento a información pública. Tendrá una duración de diez meses, que se cumplirían en septiembre de 2026.
Por su parte, la tercera fase consistirá en la información pública y concertación del POM, con las actualizaciones correspondientes, y concluirá con la Aprobación Inicial del POM por el Pleno del Ayuntamiento de Toledo, Tendrá una duración de ocho meses que alcanzarían ya el mes de mayo de 2027.
Y, por último, la cuarte fase concluirá con la publicación de la aprobación definitiva por la Consejería competente en materia de Ordenación Territorial y Urbanismo, y se establece una duración de cuatro meses. De ajustarse a lo previsto, llegaría al mes de septiembre de 2027.
Un plan con casi 40 años de antigüedad
Hasta que llegue esa aprobación definitiva, la normativa urbanística en vigor de Toledo seguirá siendo el Plan General de Ordenación Urbana (PGOU) del año 1986, que entró en vigor una vez que en 2018 se anuló definitivamente el POM de 2007.
Este plan urbanístico, con casi 40 años de antigüedad cuenta con 32 modificaciones puntuales, algunas de ellas sin aprobar -como la 29- o en tramitación -como la 31, que supone la ampliación del Polígono industrial-. La última, la 32, se aprobó recientemente y tiene como objetivo la regulación de las viviendas de uso turístico y los apartamentos turísticos en la ciudad.