Dos mil nuevos al día, eso es lo que produce la explotación avícola Huevos Camperos JJ en la localidad de Cabañas de Yepes (Toledo). Unos huevos sin ningún aditivo, ni utilización de antibióticos ni pesticidas que se vende especialmente a cocineros con estrella Michelín e incluso son consumidos por persona alérgicas al huevo.
Juan José Matallanos, o JJ como es conocido por todos, es el artífice de esta explotación que nació de su amor por los animales, “mi vocación desde pequeño son los animales, siento admiración por ellos” y por el “equilibrio natural”, lema que lleva tatuado en su piel.
Actualmente Cabañas de Yepes acoge una explotación con 2300 animales que producen unos 2000 huevos al día. “Destacamos en calidad dado que en el mercado he hecho pruebas con todo tipo de huevos y ninguna da la misma talla que da el mío, en colágeno, en vitaminas, por su textura y en grasas saludables”, señala.
El huevo que produce es un producto de gran calidad, una cáscara “con una dureza increíble y una es yema que colágeno puro, hasta 8 veces más que uno convencional”.
“Al romper el huevo vas a ver el color de la yema oro que te va a llamar la atención, cuando rompes la proteína, rompes la textura, el huevo, lejos de expandirse, sube como si fuera un pastel y se convierte en un blanco inmaculado”, señala JJ que además asegura que es un huevo muy utilizado por los reposteros porque hace “efecto levadura”.
Para conseguir este producto de calidad, la explotación no utiliza ni antibiótico, ni pesticidas, una alimentación totalmente natural y una vida en libertad para los animales.
“He creado una infusión realidad con plantas naturales que con las toxinas que tienen estas plantas hacen de insecticida natural para matar al acaro rojo que es uno de los principales problemas que tenemos los granjeros avícolas”, señala. Una infusión especialmente diseñada por él que actúa como un antibiótico natural disuelto en el agua de las gallinas para evitar así cualquier tipo de fármaco o químico para tratar a los animales.
Ver esta publicación en Instagram
Además, como alimentación ha optado por “unas semillas cien por cien naturales cultivadas en España que tiene todos los nutrientes que mis animales necesita para vivir”, señala. Trigo, cebada, maíz, legumbres y pimentón De La Vera para dar color al huevo consiguen un sabor y color mucho más intenso.
“Mis gallinas viven como quieren, yo las tengo en unos módulos y cuando llego les abro la granja y ellas pueden salir todo el día. Si llueve o hace mucho calor están dentro pero al amanecer y al atardecer se llena todo el campo de gallinas”, señala.
Considera que uno de los aportes más importantes para sus animales son los que les proporcionan la tierra en la que se crían. “Trabajo mucho con los minerales, y esta tierra tiene minerales muy favorecedores para la salud de los animales. Tiene calcio, magnesio, potasio y en conjunto los tres minerales aportan un valor añadido a lo que es el producto final, el huevo”, asegura.
Estos huevos se compran especialmente por chefs con estrella Michelín, pero también JJ cuenta con un grupo de entre 60 o 70 personas alérgicas al huevo que “llevaban años sin comer huevos y están comiendo éstos y no tienen reacción”, asegura.
Actualmente tiene varios proyectos para que estos huevos estén al alcance de todos, así está preparando una plataforma con otros productores respetuosos con el medio ambiente y los animales para comercializar juntos a través de internet.
Además, está preparando una nueva explotación en la vecina localidad de Noblejas “porque he vista que hay terrenos muy favorables para estos productos y vamos a hacer una más grande”, adelanta.