La palmera canaria que se ubicaba en la glorieta de una de las principales entradas a la de ciudad de Toledo, entre la calle París y la avenida de Madrid, a la que se accede desde la A-42, ha sido talada después de que un escarabajo picudo rojo haya hecho enfermar al ejemplar.
Ha sido el Grupo Municipal Socialista el que ha advertido en un comunicado de esta actuación, a la que incluye en una "tala indiscriminada de árboles en la avenida de Madrid" que, a su juicio, "supone un ataque directo al patrimonio y a la calidad de vida de los toledanos".
Sin embargo, un informe patológico forestal externo explica la infestación de esta palmera y recoge también el secamiento progresivo de siete cipreses de la misma vía. La actuación propuesta por el Ayuntamiento en base a este informe determinó la tala de la palmera y el ajardinamiento de la glorieta, pues el tronco de la palmera se encontraba en estado de "pudrición" y la evolución esperada era "negativa".
"Si no se toma ninguna medida de control o tratamiento, ambas plagas acaban en breve plazo con los árboles infestados", advertía el informe, fechado el pasado 27 de noviembre por la empresa Asfaltos Vicálvaro.
Los efectos que ha provocado en cuestión de meses este insecto se han reproducido durante los últimos años en otras ciudades, también de las Islas Canarias, donde llegó por el transporte y comercio de otras palmeras.
De los peores enemigos de este ejemplar
Se trata de uno de los enemigos más temidos de este árbol, del que se alimenta "vorazmente" creando hoyos en su interior. El picudo rojo mide entre 2 y 5 centímetros y es capaz de perforar galerías de hasta un metro de longitud en palmeras canarias, datileras y cocoteras, provocándoles amarillamiento, marchitamiento y caída de palmas enteras que terminan con la vida de la palmera.
Las hembras del escarabajo adulto vuelan, una vez fecundadas, desde una palmera infectada hacia otra sana donde pone de 300 a 500 huevos en las heridas o galerías abiertas, con preferencia en la tejido más blando de la base, como ha sido el caso del ejemplar de la avenida de Madrid, tal y como se aprecia en la siguiente imagen.
Así infesta el escarabajo a las palmeras
"Las hembras adultas viven 30 días y los machos 87 días y durante ellos, mientras la palmera esté verde y no muera el escarabajo, completa varios ciclos biológicos hasta que se queda sin alimento y vuela largas distancias a contra viento (hasta 3 km) hacia otra palmera sana atraído por los karionomas que ésta desprende después de la poda, iniciando de nuevo el ciclo", recoge el informe externo al que ha tenido acceso este medio.
En el informe se específica también que "los síntomas aparecen con un retraso de tres meses a un año, obligando a que los trabajos de control o tratamientos vayan por detrás de la plaga". "En ambos casos el amarillamiento y marchitamiento de las palmas, junto con la deformación de la copa, evidencian la presencia del agente en fase de huevo-larva, de modo que cuando el escarabajo haya completado su ciclo hasta adulto, haya secado esta palmera y no tenga alimento suficiente en ella se trasladará al resto de palmeras del municipio", advierte.
Siete cipreses
También incluía el informe medioambiental, aunque sin mencionar una posible tala de los ejemplares, la sintomatología de los cipreses mencionados, afectados por "marchitez", que se manifestaba en los mismos "a través de follaje marchito y decolorado, cancros en la corteza y muerte gradual de ramas".
El PSOE denunciaba tanto la tala de la palmera como de los cipreses de la avenida de Madrid, tachando la actuación de "arboricidio" del Gobierno local de PP y Vox. Por ello, la concejala Ana Abellán reclama la convocatoria extraordinaria y urgente del Consejo Municipal de Medio Ambiente, para clarificar estos "ataques directos al patrimonio y a la calidad de vida de los toledanos".