Sofocos, problemas urogenitales, osteoporosis son algunas de las afecciones que habitualmente se relacionan con la menopausia. Sin embargo, no es frecuente que las mujeres sean conscientes de que la menopausia también puede afectar a su visión, pudiendo empezar a presentar durante esta etapa de su vida ojo seco.
El ojo seco es una patología muy frecuente. Alrededor de un 40% de las personas mayores de 40 años la presentan. El 70% de ellas son mujeres, que desarrollan esta afección durante la menopausia, ya que tanto la edad como cualquier desequilibrio hormonal figuran entre los desencadenantes de esta patología.
Aunque no se trata de una patología grave, sí que ocasiona distintas molestias a las pacientes, que presentan sensación de ardor o picazón en los ojos, ojos irritados con frecuencia, sensación de que algo raspa o de que se tiene arenilla dentro del ojo, lagrimeo, incomodidad a la luz o cansancio en los párpados, afectando considerablemente a su calidad de vida.
Para la doctora Sofía Navarro Corcuera, especialista en Oftalmología del Hospital Quirónsalud Toledo, es "muy importante que estas mujeres acudan a un especialista ante la aparición de cualquiera de estos síntomas para ser tratadas".
"Como ocurre con otras molestias que surgen en esta etapa vital de las mujeres, es frecuente que las pacientes interioricen que son afecciones normales propias de la menopausia, que se resignen a sufrirlos y que no acudan al médico", avanza Navarro.
El tratamiento del ojo seco precisa de una evaluación minuciosa personalizada para poder ofrecer el tipo de terapia más eficaz en cada persona.
IPL: un tratamiento indoloro y sin efectos secundarios
La doctora se refiere al tratamiento mediante Luz Pulsada Intensa (IPL), una técnica disponible en el Hospital Quirónsalud Toledo, que se realiza de forma ambulatoria, logrando la estimulación de las glándulas de Meibomio, encargadas de aportar grasa a la lágrima para evitar su evaporación y mantener el ojo hidratado, mejorando la calidad de la lagrima de forma más prolongada en el tiempo que los tratamientos convencionales
Efecto antiinflamatorio y antiséptico
Mediante la aplicación de este tratamiento se consigue, además, un efecto antiinflamatorio y antiséptico, restablecimiento el correcto funcionamiento de estas glándulas, aliviando así de forma significativa las molestias ocasionadas por el ojo seco.
"La aplicación es muy sencilla, el paciente no requiere de ninguna indicación especial tras el tratamiento y los beneficios son evidentes, ya que mejora significativamente las molestias que ocasiona el ojo seco", subraya Navarro.
Su consejo es "acudir siempre a un especialista que, mediante unas sencillas pruebas, va a realizar un diagnóstico, valorará qué tipo de ojo seco padece, cómo está su película lagrimal y recomendará un tratamiento personalizado ajustado a su caso".
La doctora Navarro resume algunos de estos consejos en este vídeo.