Ya es tradición en muchas ciudades del mundo terminar el año con la popular carrera conocida como la San Silvestre, que coincide con la celebración de este santo correspondiente al día 31 de diciembre. La de Toledo ya es la que cuenta con una mayor participación en Castilla-La Mancha y se ha convertido en una de las más resaltadas del país. Algunos de sus participantes nos cuentan sus motivaciones y la positividad que encuentran entre todos los que se animan a correr estos 8 kilómetros de travesía urbana que dejan preciosas imágenes para cerrar el año.
Rebeca, vecina de Burguillos de 30 años, considera que la San Silvestre Toledana es una carrera "para disfrutarla". "Llevo corriéndola cuatro años y nunca lo hago marcándome un objetivo o marca concreta. Siempre la hago con mi hermana pasa pasarlo genial, disfrutar del ambiente y animarnos la una a la otra en los tramos más difíciles. Para nosotras es especial, y la terminamos siempre con un abrazo".
Así lo cree también su hermana, Mónica, de 30 años, que apunta que se trata de una carrera con la que marca su final de año, "disfrutando del recorrido en buena compañía, admirando los bonitos paisajes de la ciudad". Dice que la realiza también desde hace cuatro años, "con muchísima ilusión" y anima a "todas las personas a hacerla y así termina el año de una forma muy saludable".
Víctor, un vecino del Polígono de 39 años que participa desde hace 18 años en esta carrera junto a su hermano y algunos amigos, no ve "mejor manera de terminar el año que corriendo por las calles de tu ciudad respirando un ambiente festivo y multitudinario". "Nunca fallamos, nos encanta", dice el toledano.
Por su parte, Enrique, vecino de Toledo, la lleva haciendo desde 2014. "Para mí es especial pues hace casi dos años, en enero de 2017, me detectaron una rotura degenerativa de menisco y tuve que dejar de correr. Estuve todo el año pasado parado y con dudas sobre si podría volver a correr o no. Afortunadamente, con trabajo de gimnasio y natación vuelvo a poder correr. Mi objetivo ahora no es tanto el tiempo como poder terminar de manera decente", apunta el toledano, que afirma que le hace "mucha ilusión estar esta tarde en la línea de salida y sentir toda la energía y positividad que hay en esta carrera".
Respecto a la marca, Enrique espera volver a hacer la San Silvestre en un "tiempo decente" para sus condiciones de forma y de edad -sale a correr un día a la semana-. "Espero hacerla en 43 o 44 minutos y quedar por la mitad de la clasificación general. En 2016, ultima que corrí antes de la lesión, quedé el 1.027, con un tiempo de 41:34, y el 14 de los mayores de 60 años", recuerda Enrique.
Por último, Esther, vecina de Cobisa y gran aficionada a este tipo de carreras, lamenta que este año no participará ya que no ha podido prepararla bien. "El último año que la corrí iba lesionada y lo pasé mal. Este año me estoy acordando mucho y me da pena no ir".
"Llevo corriéndola desde el 2011 y solo falté el año pasado porque tenía el brazo roto. Es una de las carreras más bonitas y ya participa en ella el doble de gente que hace unos años", apunta Esther, que espera volver a despedir el 2019 de una manera tan saludable que seguro que también ayuda a rebajar los 'excesos' navideños que solemos cometer durante estas días de fiesta.