
Carlos Velázquez, alcalde de Toledo, en el IV Congreso Ibérico de Restauración Fluvial 'Restauraríos'/ Foto: Ayuntamiento
Al nuevo alcalde de Toledo, Carlos Velázquez (PP), que ya gobierna con Vox en la ciudad, no le gustaban hace unos meses los debates “localistas” sobre el agua. Es más, le parecían “paletos”. Ahora, en su nuevo papel como regidor municipal, entra de lleno en ellos anunciando como una de sus primeras medidas un plan de “vertidos contaminantes cero” para el río Tajo a su paso por la ciudad, enmarcado dentro de la nueva Concejalía específica que se ha puesto en marcha, y que quiere recuperar el proyecto 'Take me to the river'. Se trata de un proyecto de hace más de 15 años, para adecuar las riberas del río tajo a su paso por la ciudad y convertirlas en un centro de ocio, esparcimiento y convivencia tanto para los toledanos como para los visitantes.
Así lo ha dicho durante su intervención en la inauguración del IV Congreso Ibérico de Restauración Fluvial 'Restauraríos', que se celebra en la capital regional, subrayando que el Tajo para los toledanos es “mucho más” que un cauce de agua. “Nos ha protegido históricamente, nos ha abrazado, nos ha defendido y hay que devolverle todo lo que nos ha dado”, ha dicho.
También se ha referido así al estudio de la Cátedra del Tajo UCLM-Soliss que ha detectado vertidos en 26 puntos del Tajo a su paso por Toledo de los que solo diez tienen autorización por parte de la Confederación Hidrográfica del Tajo. “Desde el Ayuntamiento vamos a trabajar para que cada una de las administraciones asuma sus compromisos”, ha agregado.
Estas palabras del nuevo alcalde contrastan con las que pronunció en noviembre del año pasado cuando, como presidente del PP de Toledo, aseguró que volver a debatir sobre agua y trasvases desde el punto de vista localista es “absurdo y paleto”, reclamando poner el prisma de la discusión en el plano nacional. De hecho, entonces subrayó que en la provincia de Toledo, la mitad de su población bebe agua gracias a embalses de Madrid. Eso sí, obviando que también Madrid bebe de embalses de la provincia de Guadalajara.
La vicesecretaria del PSOE de Toledo y diputada nacional, Esther Padilla, exigió entonces al presidente regional del PP, Paco Núñez, que desautorizara a Velázquez, por “insultar a los castellanomanchegos”. En su opinión, además de “traicionar” los intereses hídricos de la región planteando más trasvases, falta al respeto e insulta a quienes reclaman justamente más agua para la comunidad autónoma “en un momento de sequía acuciante” y que, básicamente, es “toda la sociedad de Castilla-La Mancha”.