El alcalde de Toledo, Carlos Velázquez, ha anunciado este jueves el cierre de un punto de vertido contaminante al río Tajo, "una demanda de los vecinos del barrio de San Antón, que llevan años sufriendo problemas de insalubridad pública y malos olores".
Se trata de una obra que va a acometer la empresa concesionaria del servicio de suministro y abastecimiento de agua en la ciudad, Tagus. La semana que viene comienza el replanteo, que cuenta con un plazo de ejecución de mes y medio y tiene un presupuesto de 70.000 euros, según ha informado el Consistorio toledano en nota de prensa.
En concreto, consiste en la desconexión al punto de vertido y la conexión al colector del Aserradero y que viene desde Bargas y Olías del Rey, que se encuentran en un punto más alto, por lo que se va a instalar una arqueta de bombeo para que las aguas del edificio queden recogidas en la red de saneamiento municipal.

El alcalde reitera que "este es el compromiso del Gobierno municipal con el río Tajo". De hecho, en el acto de apertura del curso académico de la Universidad de Castilla-La Mancha, Carlos Velázquez anunció también que desde el Ayuntamiento "se va a proceder a cerrar, antes de final de año, otro de los puntos contaminantes, que se encuentra en el campus de la Fábrica de Armas".
"Un vertido como consecuencia de una depuradora que no funciona correctamente y que se encuentra cerca del edificio de Sabatini", trasladan.
- Arroyo del Aserradero / Foto: Ayuntamiento
- Colector del arroyo del Aserradero / Foto: Ayuntamiento
"Vamos a tratar de que el río, a su paso por la ciudad, esté mucho mejor dentro de cuatro años que lo que está ahora", ha asegurado Velázquez. "Se trata de ir dejando de verter agua sucia poco a poco y en la medida de nuestras posibilidades y este es un compromiso compartido con todos los toledanos", ha concluido.