"Volver al origen no es retroceder, quizás sea andar hacia el saber". Esta frase de una de las canciones del cantante Macaco es la mejor forma de resumir la importancia de conocer el pasado de nuestra Comunidad Autónoma. La situación estratégica de Castilla-La Mancha en el centro de la Península Ibérica ha hecho que sus territorios hayan sido muy deseados por las diferentes civilizaciones que se han asentado en la región a lo largo de la historia. Por todos los lugares de la Comunidad Autónoma se encuentran impresionantes conjuntos patrimoniales a través de los cuales se puede conocer el pasado de la región.
Un ejemplo de ello son los Parques Arqueológicos existentes en Castilla-La Mancha, unos espacios físicos en los que confluyen: la presencia de uno o varios bienes de interés cultural declarados, con categoría de Zona Arqueológica, conforme a la legislación de Patrimonio Histórico vigente y unas condiciones medioambientales adecuadas para la contemplación, disfrute y comprensión de dichas Zonas.
“Los Parques Arqueológicos son unas figuras relativamente nueva en el patrimonio español, en Castilla-La Mancha hay cinco, uno por cada provincia y básicamente son grandes yacimientos arqueológicos con restos monumentales, que tiene que cumplir dos requisitos: por un lado que estén declarados Bien de Interés Cultural y por el otro que estén en un entorno natural que tenga ciertos valores paisajísticos”, explica Ramón Villa, jefe de servicio de Patrimonio y Arqueología de la Junta.
Parque Arqueológico de Recópolis (Guadalajara)
“Es la única creación visigoda que conservamos”, señala Ramón Villa. El Parque Arqueológico de Recópolis está formado por los yacimientos arqueológicos de la ciudad visigoda de Recópolis y la ciudad andalusí de Zorita con su alcazaba, (después convertida en Castillo). Dista una de otra escasamente 1,5 kilómetros siguiendo la ribera del río Tajo a la altura del municipio de Zorita de los Canes en Guadalajara.
En honor a su hijo Recaredo, en el año 578 el rey Leovigildo levantó la ciudad de Recópolis. Rodeada por una gran muralla, su interior es un tesoro de la cultura visigoda, destacando entre las edificaciones de su conjunto palatino, su basílica, su plaza o talleres artesanos. En sus cercanías se puede recorrer el castillo musulmán de Zorita de los Canes, fortaleza levantada sobre un roquedal a las orillas del Tajo.
El Parque cuenta con un Centro de Interpretación con información necesaria para comprender la historia y el contexto histórico en el que se desarrolla el yacimiento arqueológico. Dispone de zona de exposición, sala de proyecciones, área de descanso, tienda-boutique y merendero.
De cara a Semana Santa, el Parque Arqueológico estará abierto el jueves de 10.00 horas a 14.00 horas; viernes, sábado y domingo de 10 a 14 horas y de 16 a 20 horas y el Lunes de Pascua de 10 a 14 horas. El precio de la entrada general es de 5 euros y es gratuita para niños y niñas menores de 8 años.
Parque Arqueológico de Segóbriga (Cuenca)
“Es una ciudad romana muy importante”, explica el jefe de servicio de Patrimonio y Arqueología de la Junta. El Parque Arqueológico de Segóbriga está constituido en torno a la ciudad romana de Segóbriga, cercana a la localidad de Saelices y levantada sobre un cerro protegido por el río Cigüela. Desde Segóbriga se controlaban las explotaciones mineras de lapis especularis, placas de yeso utilizadas en las contrucciones romanas para acristalar ventanas. “De ahí se exportaba a todo el Imperio Romano”.
Sorprende del Parque Arqueológico los restos de su Anfiteatro, del Circo, del Foro o de sus Termas y Gimnasio, que conforman uno de los conjuntos romanos mejor conservados de Hispania. “En Segóbriga, se vienen haciendo en el teatro diferentes actividades para escolares, aunque en todos los casos los parques están abiertos a escolares, y además estamos intentando potenciar la actividad didáctica”, señala Villa.
La Diputación Provincial de Cuenca ha apostado por implantar un horario ininterrumpido y visitas guiadas gratuitas en el Parque durante la parte central de la Semana Santa, concretamente del 18 al 22 de abril, con el objeto de aprovechar al máximo el mayor flujo de visitantes a la provincia durante estos fechas vacacionales.
En esta ocasión, del 18 al 22 de abril --de Jueves Santo a Lunes de Pascua--, Segóbriga abrirá sus puertas al público de manera ininterrumpida de 10.00 a 19.30 horas, además de ofertar diariamente cuatro visitas guiadas, que serán gratuitas con la adquisición de la entrada, a las 11.00, 12.30, 16.30 y 18.00 horas, una más que en la Semana Santa de 2018. El precio de la entrada es de seis euros, y hay tarifa reducida para grupos, estudiantes, discapacitados , personas mayores de 65 años y familias numerosas.
Parque Arqueológico del Tolmo de Minateda (Albacete)
“Es una ciudad que tiene su máxima expansión durante la época visigoda, donde llega a ser una ciudad episcopal”, asegura Ramón Villa. El Parque Arqueológico del Tolmo de Minateda, recién inaugurado, está configurado en torno al yacimiento del mismo nombre, tratándose de un asentamiento humano con una dilatada adscripción cultural que arranca desde la Edad de Bronce y llega hasta el siglo XX. Está situado en el término municipal de Hellín, en el sureste de la provincia de Albacete, lindando con Cieza (Murcia), sobre un cerro amesetado (“muela”), de 500 metros de altura.
“El entorno natural es impresionante, está en una roca que se eleva sobre la llanura, con unas vistas magníficas”, explica el jefe de servicio de Patrimonio y Arqueología de la Junta. Se trata de un enclave que muestra construcciones defensivas de los pueblos que la habitaron: murallas, torres, y entre sus tesoros, una basílica visigoda.
El precio de la entrada es de cinco euros e incluye servicio de guía. Esta Semana Santa se podrá visitar el parque el jueves de 10.00 horas a 14.00 horas, el sábado de 10.00 horas a 14.00 horas y de 17.00 horas a 21.00 y el Lunes de Pascua de 10.00 a 14.00 horas. El viernes y domingo permanecerá cerrado.
Parque Arqueológico de Alarcos (Ciudad Real)
En la cuenca alta del Guadiana, a unos ocho kilómetros de Ciudad Real, se encuentra el Parque Arquológico de Alarcos-Calatrava la Vieja. Está formado por un núcleo localizado en el yacimiento de Alarcos y su entorno y el yacimiento arqueológico visitable denominado Calatrava la Vieja.
Sus excavaciones nos han ido regalando restos que van desde la Edad de Bronce a la época medieval, destacando su poblado íbero. En las inmediaciones de su fortaleza se desarrolló una de las batallas más importantes de nuestra historia, la que en 1195 enfrentó a almohades y cristianos.
El horario para visitar este Parque es del 15 de abril al 15 de septiembre los miércoles, jueves y domingos de 10.00 a 14.00 horas y los viernes y sábados de 10.00 a 14.00 horas y de 18.00 a 20.00 horas. El precio de la entrada general es de 5 euros.
Parque Arqueológico de Carranque (Toledo)
De forma fortuita, en el año 1983 se descubrió la villa romana de Carranque, en la provincia de Toledo. Situada junto a un bello paraje del río Guadarrama, aun se encuentra en período de excavación e investigación.
En la Casa de Materno, que ocupa unos 1.000 metros cuadrados, se conservan veinte habitaciones pavimentadas con mosaicos. Uno de los más bellos es el que representa al dios Océano rodeado de peces.
El Parque Arqueológico permite a los alumnos viajar en el tiempo y conocer cómo era la vida de la época en el campo mediante una de las construcciones más características: las villas. “Del 10 al 12 de mayo se celebrarán unas jornadas romanas, una actividad, abierta al público con la que se pretende recrear el mundo romano”.
El Parque se puede visitar de miércoles a viernes de 09.30 a 14.30 horas, sábados de 10.00 a 18.00 horas y los domingos de 10.00 a 14.30 horas. El precio de la entrada general es de 5 euros.