El día más caluroso que se ha vivido hasta el momento este año en Toledo no ha impedido que centenares de personas hayan salido a las calles del Casco Histórico a reivindicar los derechos del colectivo LGTBIQA+ en un ambiente festivo.
A las 20.00 horas, este 28 de junio, Día Internacional del Orgullo LGTBI, los termómetros aún rondaban los 40ºC en la capital castellanomanchega. La plaza de Zocodover se convertía en un hervidero de calor pero también de risas, mucho colorido, banderas, música y cánticos.
Los manifestantes danzaban tras la salida por una aglomerada calle Comercio, con la atónita mirada y la complicidad de visitantes y residentes. Lo hacían al ritmo de la batucada Marakanai y de proclamas como "fuera del armario, orgullo toledano", "se nota, se siente, Toledo Entiende" o "ni un paso atrás en los derechos trans". Todo ello, bajo el lema de este año: "Diversidad rural, orgullo universal".
Las banderas arcoíris y las que representan al colectivo trans se entremezclaban también con otras en apoyo a Palestina o con carteles artesanales que rezaban frases como "Mi libertad no es una amenaza, tu odio sí".
Ana, de Madrid, ha participado este sábado en la protesta toledana por una razón “de peso”. Nos explica que lo hace junto a sus hijos. “He venido por ellos”. Pero también porque cree necesario “intentar que haya una normalización y una convivencia de todos de manera natural. Me parece importante reivindicarlo”.
Tiene 64 años y dice que “todos tendríamos que participar en este tipo de actos, sea en Toledo o sea donde te pille mejor”. Ana no oculta su preocupación cuando le preguntamos por los avances en derechos humanos.
“En muchos sectores retrocedemos o quieren que retrocedamos”, dice esta manifestante que también reconoce preocupación por la posición de los más jóvenes. “Veo una juventud más retrograda de lo que éramos nosotros y veo falta de lucha”, porque cree que a veces se quedan en “cosas superficiales”.
Manuel, casi cuatro años esperando la transición de género
También ha participado en la manifestación, Manuel Alonso, un joven toledano de casi 22 años. Cuando cumplió la mayoría de edad acudió al médico de cabecera para poder hacer el proceso de transición de género. "Sigo sin ningún progreso y me parece un poco feo porque está yendo demasiado lento", lamenta.
Explica que acude a esta manifestación a luchar por sus derechos, para poder ser un hombre trans y representar a su comunidad. Apunta que ha tenido problemas al querer comenzar con la hormonación transgénero. “No soy solo yo, somos muchísimos más en Castilla-La Mancha a los que han retrocedido el proceso y eso no puede ser”.
“Personalmente no he recibido ninguna reacción negativa al decir que soy un hombre pero sí que conozco a varias amigos que han sufrido muchísima discriminación cuando han salido del armario y yo no me puedo quedar callado cuando les dicen algo. Voy a luchar tanto por mí como por ellos”, asevera este joven toledano.
“Es un exitazo, como todos los años. Es rotundo el apoyo que tenemos por parte de la sociedad, aunque en algún sitio no nos quieran dar visibilidad”, decía el presidente de Bolo-Bolo. Este año, y ya van tres, en el balcón del Ayuntamiento toledano, donde gobiernan PP y Vox, ni siquiera luce una pancarta como gesto de apoyo.
“Somos gente muy diversa, muy plural estamos aquí para celebrarlo, y para manifestarnos por los derechos del colectivo LGTB”, comentaba para lamentar después: “Por desgracia sigue habiendo discriminación hacia gente de nuestro colectivo”.
También ante los medios se pronunciaban antes de la salida, Leticia Rey, secretaria de la Asociación Bolo-Bolo; Jesús Múñoz, miembro y anterior presidente de la Asociación Plural LGTBI+ Mancha Centro; la concejala de Asuntos Sociales, Inclusión, Familia y Mayores Marisol Illescas; y la delegada provincia de Igualdad, Nuria Cogolludo.
Llamamiento por los derechos ante "un repunte de discriminación"
Ya en la plaza de Ayuntamiento Sara Bachiller, activista del movimiento queer ha sido la encargada de leer un manifiesto en el que se hacía un “llamamiento urgente por los derechos LGTBIAQ+ en mitad de un repunte de discriminación”. En la lectura también participaba Pedro Jesús García, militar y activista.
Este sábado la comunidad LGTBIAQ+ de Toledo, y quienes apoyan sus derechos, se ha reunido nuevamente para protestar, siguiendo la estela de movimientos históricos como Stonewall en 1969 o las marchas de Barcelona en 1977 y Madrid en 2005.
Hay que visibilidar “todos los problemas que tiene el colectivo y todas las dificultades que nos ponen, sobre todo en los ayuntamientos, en las comunidades autónomas y en todas las provincias”, decía Sara Bachiller, porque “sigue habiendo muchísimos prejuicios”.
El manifiesto dejaba claro que hay que seguir luchando contra la “la persistente discriminación que, a día de hoy, sigue afectando a las identidades disidentes en la ciudad, a pesar de los avances logrados como la despatologización trans y la aprobación del matrimonio igualitario, que este año celebra su vigésimo aniversario”.
El último informe estatal revela que una de cada cuatro personas LGTBIAQ+ sufre discriminación en España y que esa es, decía, “una realidad es particularmente dura en Castilla-La Mancha, especialmente en el ámbito rural”.
Reivindicaciones políticas
Hoy en Toledo se ha afeado que hace tres meses en el Ayuntamiento, con votos de Vox y PP, se instase a prohibir la participación de personas trans en las competiciones deportivas si no es dentro de su “categoría biológica”. “Es inaplicable, pero sienta un peligroso precedente”, han advertido hoy.
O el hecho de que el colectivo LGTBIAQ+ haya quedado excluido de la reforma del Estatuto de Castilla-La Mancha. Lo califican de “error inexplicable” que deja al colectivo en situación de “desamparo” aunque se haya prometido una enmienda en su tramitación en el Congreso de los Diputados.
Han recordado al Gobierno de Emiliano García-Page que la Ley de Diversidad Sexual y Derechos LGBTI de Castilla-La Mancha, de mayo de 2022, “sigue sin cumplirse de manera efectiva, evidenciado por una atención sanitaria deficiente para personas trans, la falta de consolidación del Consejo LGBTI y la publicidad abierta de terapias de conversión sin consecuencias”.
El manifiesto enfatizaba en que el problema central “no es a quién se ama o lo que se es, sino el desafío activo a la norma impuesta por el sistema, que se empeña en mantener conceptos como el binarismo de género, la heterosexualidad y la familia tradicional como inamovibles, invirtiendo millones en corregir desviaciones”.
- Manifestación por el Día del Orgullo 2025 en Toledo / Foto: Fidel Manjavacas
- Manifestación por el Día del Orgullo 2025 en Toledo / Foto: Fidel Manjavacas
- Manifestación por el Día del Orgullo 2025 en Toledo / Foto: Fidel Manjavacas
También un mensaje de esperanza frente a la actual coyuntura que pasa por la “resistencia” y por “construir redes de apoyo más firmes, especialmente en el entorno rural donde la soledad es más palpable”.
Durante el acto se ha hecho entrega de los Premios Javier Fernández, destinados a Daniel Gómez, Federico Armenteros, Uge Sangil, Las hijas de Felipe y Jesús A. Muñoz Morales.
Había muchas ganas de pasarlo bien. La manifestación tiene mucho de lúdico, como ayer lo tuvo el Toledo Fest, otro de los eventos de esta semana cultural 'Toledo Entiende' o la fiesta de esta noche Over the rainbow, a cargo de María Aguado, Leticia con z, Marcus Massalami y Sugar Nelly.