Toledo califica de "política" la sanción de la CHT por las espumas en el Tajo

El portavoz del Gobierno de Toledo, José Pablo Sabrido, ha denunciado este martes la “sanción política” que la Confederación Hidrográfica del Tajo (CHT) quiere imponer a Toledo para "ocultar" el episodio de espumas aparecidas en el río a su paso por la ciudad el pasado mes de octubre y ha exigido a este organismo que ofrezca una explicación sobre lo ocurrido “porque los toledanos lo merecen”.

Acompañado la concejal de Medio Ambiente, Noelia de la Cruz, Sabrido ha fijado la posición del Ayuntamiento tras recibir las notificaciones del inicio de cuatro expedientes por vertidos al río, documentación “que nada tiene que ver” con las espumas aparecidas en la ciudad el 15 de octubre ya que las muestras que toman para tales expedientes “no justifican de ninguna manera la contaminación del Tajo y las espumas aparecidas aguas arriba de Toledo”.

Para el Gobierno local, si se pretende justificar la aparición de espumas con estos expedientes "se está faltando a la verdad", ha afirmado el portavoz, quien ha manifestado que los toledanos “tenemos derecho a saber cuál es el motivo de las espumas” y de la contaminación permanente del río antes de que llegue al término municipal de Toledo.

José Pablo Sabrido ha aclarado que el expediente ahora iniciado puede o no concluir con propuestas de multas; no obstante, ha recordado que el delegado del Gobierno ya apuntó sanciones a la ciudad en los días posteriores al episodio de espumas, lo que demuestra que todo este proceso es una “sanción política que quieren imponer a Toledo” cuando la CHT “es la responsable de que el Tajo esté muerto”.

Los expedientes para la depuradora y un colector

Con respecto a los expedientes que han llegado al Consistorio y como adelantase ayer eldiarioclm.es,  Sabrido ha explicado que dos se centran en vertidos en el colector del Aserradero y otros dos a raíz de muestras tomadas en la depuradora del Polígono.

Para el Gobierno local, en el primer caso “es un sinsentido” que un organismo dependiente del Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación como es la CHT pretenda sancionar una infraestructura que se está arreglando por parte de otra empresa subsidiaria también del mismo Ministerio (ACUAES).

Sabrido se ha mostrado confiado en que el procedimiento que ahora se inicia dé la razón al Ayuntamiento y ha manifestado la "indefensión" del Consistorio ante una medida que proviene de la misma administración que sabe que se está solucionando el problema. “Tomar muestras de una infraestructura a sabiendas de que es deficiente es ofender a la inteligencia o ganas de perseguir a los toledanos”, ha lamentado.

También ha señalado que el Consistorio ha recepcionado y puesto en funcionamiento el colector cuando ACUAES garantizó que se iban a hacer las acometidas que faltaban y que precisamente dan servicio al término municipal de Toledo; “¿qué sentido tenía poner en marcha una infraestructura sin que los toledanos estuvieran cubiertos?”, se ha preguntado el portavoz.

Más de  cuatro millones para la depuradora

Con respecto a la depuradora de Santa María de Benquerencia, Sabrido ha recordado que la infraestructura fue ampliada por la actual ACUAES en 2006 con unos objetivos de calidad del agua depurada menos exigentes que los que ahora se reclaman, algo que el Gobierno local comparte, pero que evidencia el esfuerzo adicional que el Consistorio debe realizar para alcanzar estos objetivos.

En este sentido, el Consistorio destina más de cuatro millones de euros al año para el mantenimiento de las estaciones depuradoras y a la puesta en marcha de un Plan de Vertidos que acaba de ser reforzado para garantizar que las empresas que utilizan las estaciones de tratamiento de la ciudad cumplan los requisitos, como ha explicado Noelia de la Cruz.

La concejal de Medio Ambiente también ha precisado que si el caudal de agua natural que llega a Toledo fuese mayor sería más fácil y menos costoso cumplir con las exigencias que marca la CHT y, por ello, el Gobierno local reclama una vez más el fin de los trasvases, ya que no sólo perjudican el ecosistema de la cuenca del Tajo, sino que también obliga a destinar cada vez más recursos a la depuración a los municipios ribereños.

En cualquier caso, José Pablo Sabrido ha remarcado que en la depuradora del Polígono tampoco se encuentra el origen de las espumas del Tajo y que los técnicos trabajan en las alegaciones pertinentes para responder a estos expedientes, cuyas muestras responden a picos puntuales en algunos parámetros por encima de lo permitido.

También ha reiterado el compromiso “irrevocable” del Gobierno de Milagros Tolón con el Tajo y, por ello, “estamos estudiando los medios y los procesos para hacerla más eficaz” en su función de depuración y tratamiento de las aguas residuales.