Unas 160 personas llenaron la cata didáctica organizada por la Consejería de Agricultura, Agua y Desarrollo Rural, a través de la Fundación Tierra de Viñedos, que se celebró el pasado jueves, 22 de septiembre, en el Campus de la Fábrica de Armas de la Universidad de Castilla-La Mancha en Toledo.
Según datos de la organización, esta fue la cata más numerosa del programa diseñado por la Consejería y que arrancó a principios de año con citas en distintos municipios de la región.
La iniciativa, que cuenta con la colaboración de la Interprofesional del Vino de España, persigue divulgar la cultura del vino y promover su consumo moderado y responsable a través de catas totalmente gratuitas.
La directora general de Alimentación, Elena Escobar, señalaba momentos antes de empezar la cata el éxito de estas convocatorias y como en “estos tres años que llevamos de convenio ya han pasado por nuestras catas 4.000 personas, y en este año en que hemos recuperado la normalidad estamos teniendo prácticamente llenazo en todas, con una media que no ha bajado de 100 personas por cata”.
La cita estuvo dirigida por la decana del Colegio de Enólogos de Castilla-La Mancha, Milagros Romero, que no sólo enseñó a apreciar el color, el sabor y los aromas de cada uno de los vinos catados, sino también conocimientos sobre la elaboración de los vinos tintos o blancos, la crianza en barrica, las zonas de producción y la importancia del sector vitivinícola.
Se cataron cuatro vinos, un blanco de la Denominación de Origen (DO) Uclés, y tres tintos, dos de ellos de Castilla-La Mancha, concretamente de la DO La Mancha y de la DO Méntrida, y otro de la DO Rioja, ya que en cada una de las catas se invita a una DO de fuera de Castilla-La Mancha a través de la Interprofesional del Vino de España. También distintas uvas, tempranillo, garnacha, verdejo y sauvignon blanc, para que el público apreciara los distintos matices según la variedad y la procedencia.
La cata celebrada en Toledo, al igual que las que ya se han llevado a cabo en otros lugares de la región, se desarrolló en un ambiente distendido, con un lenguaje asequible, coloquial, y se presentó como un momento de diversión.
Precisamente este fue uno de los puntos de inflexión de los directores de la cata, de Milagros Romero y de Alfonso Chacón, vicepresidente de la DO Méntrida y responsable de Bodegas Canopy, que fue el encargado de ilustrar el vino de Méntrida, una garnacha de la Sierra de Gredos. “Para eso es el vino, el mundo del vino es uno de los pocos productos que es hedonista. El vino está relacionado siempre con la amistad, con los buenos momentos, con las fiestas y con la gastronomía. ¿Qué otro producto hay que podamos disfrutar así?”, preguntó Chacón y señaló a los asistentes que “hay un vino para cada momento”, invitando a todos a explorar los vinos de Castilla-La Mancha, “una tierra con una riqueza increíble, con una diversidad de territorios, de alturas, que dan unos vinos distintos”.
Próximas citas
Tras esta cata celebrada en Toledo, seguirán otras, la semana que viene en Almansa y ya en octubre en Ciudad Real, Torrijos, Hellín y Tomelloso. Todos los interesados pueden acceder al calendario completo e inscribirse en este enlace.