La delegada de la AEMET en Castilla-La Mancha, Paloma Castro Lobera, ha ofrecido datos de cómo ha sido la primavera en 2022 y cómo será el verano que comienza hoy en cuanto a fecha, porque en cuanto a climatología se adelantó a finales de la primavera con una importante ola de calor con la que hemos convivido en los últimos días.
Según los datos ofrecidos, el carácter climático de la primavera durante los meses de marzo, abril y mayo de 2022 en Castilla-La Mancha ha sido húmedo con una precipitación media de 166.2 litros por metro cuadrado (l/m2). Valores que siempre son el resultado de una comparativa respecto a lo que se prevé normal por registros anteriores.
Así, por provincias, en Albacete (201,5 l/m2) y en Toledo (186,1 l/m2) la primavera ha sido muy húmeda, húmeda en Ciudad Real (158,5 l/m2), normal en Guadalajara (156,8l/m2) y seca en Cuenca (132,9 l/m2). En cuanto a localidades, la más húmeda fue Toledo y la más seca Cuenca, lo que Castro ha calificado como un “mapa raro” ya que Cuenca siempre es más húmeda. En cuanto a localidades, la precipitación máxima de la primavera se produjo en Hellín con 47,1l/m2.
Respecto a los meses, marzo ha sido extremadamente húmedo con una media de precipitaciones de 87,7 l/m2. Se produjo una efeméride (suceso meteorológico relevante por su valor histórico, anecdótico o climatológico) el 30 de marzo en Albacete cuyo observatorio contabilizó la caída de 4,4 l/m2 en 10 minutos. Sin olvidar la calima intensa en toda Castilla-La Mancha, que produjo abundante acumulación de polvo y barro. La ciudad donde más llovió fue Talavera con 125 l/m2.
Abril fue húmedo en la región, con una media de precipitaciones de 67 l/m2, destacando la lluvia que cayó en San Pablo de los Montes el día 5 con 68,5 l/m2. Son notables también los valores registrados en la base aérea de Albacete con 100.6 l/m2. Sin embargo, mayo fue extremadamente seco en la región, con una precipitación media de tan solo 11,5 l/m2. Y “extrañamente muy seco” en Cuenca y Guadalajara, donde Molina de Aragón registró 37,4 l/m2.
Temperaturas
Respecto a las temperaturas, la primavera de 2022 en Castilla-La Mancha fue cálida, con una temperatura media de 12,8ºC, siendo la media de las máximas de 18,8ºC y la media de las mínimas 6,8ºC, lo que produjo en este caso una anomalía térmica en las mínimas de +1,2ºC. Por provincias, la primavera fue muy cálida en Guadalajara (10,8ºC), cálida en Toledo (14ºC), Ciudad Real (14ºC) y Cuenca (11,7ºC), y normal en Albacete (12,7ºC). Destaca la anomalía térmica en Guadalajara de +1ºC.
Por meses, fue muy frío el mes de marzo, con una temperatura media de 8,7ºC, una media en las máximas de 12,7ºC y en las mínimas de 4,7ºC. Abril fue un mes frío con una temperatura media de 10,8ºC, una máxima de 16,9ºC y una mínima de 4,8ºC. Destacan las fuertes heladas que se produjeron del 2 al 4 de abril. La mínima se dio el 3 de abril en Molina de Aragón (Guadalajara) con 7,6º bajo cero y la máxima el 17 de abril en Villarrobledo (Albacete).
Paloma Castro ha calificado de “extensa” la ola de calor de la pasada semana (afectó a 38 provincias), “intensa” (se produjeron importantes efemérides del 14 al 17 de junio) y “adelantada a su tiempo”, ya que se precipitó un mes antes de lo habitual adelantando el verano, donde las olas de calor suelen producirse en julio y agosto.
Predicción del verano
La predicción de AEMET para las próximas fechas veraniegas es de una anomalía térmica en toda la península de medio grado a 1 grado por encima de lo normal, y un clima seco en los meses de julio, agosto y septiembre, también en el interior, preocupando el riesgo de incendios en las serranías de Cuenca y Guadalajara.
También “nos debe preocupar”, ha dicho la delegada, la escasez de agua embalsada en Guadalajara y Ciudad Real. El calor provocará que se produzcan tormentas incluso de granizo que serán menos frecuentes pero más intensas. En estos momentos, del 23 al 27 de junio, disfrutamos de los beneficios de una borrasca atlántica que atenuará las temperaturas, lo que nos ha permitido “volver a la primavera”, ha dicho Castro.