La asociación Proyecto Germen de Torrijos ha realizado por cuarto año consecutivo una nueva limpieza en el cauce del arroyo de la Fuentecilla. Este pasado fin de semana citó en los alrededores de este espacio para realizar una limpieza de residuos, en su mayoría plásticos arrastrados por el viento, así como latas, botes y botellas de refresco arrojados desde la carretera.
Este pequeño reguero o arroyo estacional recoge agua de lluvia principalmente en los meses de otoño e invierno, canalizándolo a arroyos vecinales de mayor tamaño. "Es por ello que merece un especial cuidado, ya que es una zona de árboles de ribera de especial protección y singularidad que cuenta con más de una veintena de especies botánicas diferentes", explica Proyecto Germen.
La asociación torrijeña hace especial énfasis en el cuidado de estos pequeños reservorios de biodiversidad dentro de los municipios, puesto que son "esenciales para diversas especies de aves, reptiles, roedores o insectos".
"Eso sin contar con la amplia gama de especies vegetales: se debe cuidar y mantener este espacio como una pequeña reserva protegida torrijeña, fomentando su conservación y cuidado, evitando crear un espacio antropizado convirtiéndolo en un parque o jardín", agregan.
Para finalizar la jornada de limpieza se realizó un taller de antotípia, se habló precisamente de esas especies botánicas que pueblan el pequeño arroyo, se explicó cómo realizar un cuaderno de campo mediante la técnica de la antotípia (una técnica fotográfica alternativa y ecológica muy útil donde se reconocen fácilmente diferentes tipos de hojas o flores) y de esta manera experimentar y aprender jugando.
Desde el colectivo torrijeño invitan a la participación vecinal para seguir construyendo "una sociedad más amable con el medioambiente".