La Consejería de Agricultura de Castilla-La Mancha publicó el 20 de julio la orden por la que se delimitan las zonas afectadas por la sequía al efecto de la consideración de la flexibilización de determinados requisitos de las ayudas directas del Plan Estratégico de la PAC (PEPAC) como causa de fuerza mayor dejando varias comarcas de la provincia de Toledo fuera de las zonas afectadas por la sequía.
Según Unión de Uniones, esta medida afecta a las comarcas de la Campana de Oropesa, la Sierra de San Vicente, Talavera y la Mesa de Ocaña, que "han sufrido por igual los estragos de la falta de lluvia durante este año 2023 por lo que no ha habido cosecha de cereal... no se entiende que se excluyan”.
La organización señala que el nuevo consejero de Agricultura, Ganadería y Desarrollo Rural de Ejecutivo de García-Page "debería saber que para considerar si una zona es afectada o no por la sequía hay que visitarla”. “No vale con fiarse de un indicador de escasez de lluvias... suma las precipitaciones caídas durante un periodo lo que puede llevar a error si en un mes cae lluvia y el resto de meses no cae nada”.
En este caso, argumenta Unión de Uniones, que al haber recibido lluvia en septiembre dicho indicador ha arrojado un resultado según el cual dichas zonas no sufren sequía, pero “la realidad muestra que sí se han visto afectadas por la sequía porque el resto de meses no ha llovido nada de nada”.
Por ello solicita que dichas zonas sean declaradas afectadas. “Le falta empatizar fundamentalmente con la comarca de Talavera, la de Oropesa y la Sierra de San Vicente que son zonas en las cuales hay una alta tasa de paro y si no se ayuda a los agricultores y ganaderos al final terminaran por vaciarse los pueblos”.