Una serie de tablas policromadas de finales del siglo XV, donde se muestra una parte poco conocida de las artes decorativas de la época en la ciudad de Toledo, han sido localizadas, recientemente, durante las obras de construcción de un hotel proyectado en varios inmuebles de la Bajada del Pozo Amargo y del Callejón del Vicario.
El hallazgo está todavía en proceso de consolidación y restauración, habiéndose procedido únicamente a su limpieza preliminar, así como de estudio por parte del equipo arqueológico que dirige la intervención.
Las tablas, que se han localizado reaprovechadas como material de carpintería en un forjado, se corresponderían, en su origen, con la decoración dispuesta en la parte superior de las paredes de un salón cuadrangular, formando y delimitando el arranque del alfarje que sustentaría su techumbre.
De este modo, el arrocabe policromado, marcaría la transición entre las paredes de la estancia y el techo, ambos, seguramente, decorados también con profusa policromía.
En estas tablas se distinguen diversos motivos decorativos con figuras humanas, en varios casos enmarcados por elementos arquitectónicos góticos. Entre estas figuras hay representaciones de reyes con su cortejo, cortesanos, escenas de combate a caballo, e incluso la representación de dos personajes, uno de los cuales se señala como Platón, el filósofo griego.
Esta última escena, además, presenta la peculiaridad de que las figuras humanas están enmarcadas por una estantería en cuyos anaqueles se conservan los libros de una biblioteca, existiendo otra tabla en la que el motivo central son estos libros, encuadernados al gusto de la época, y con los encabezados de ‘liber fisio…, liber de col…’ en sus portadas.
"Es lógico" suponer que el promotor de este encargo para la decoración de su vivienda fuera una persona ciertamente acomodada, señalan desde la Junta de Comunidades, con disponibilidad de recursos, quizás incluso relacionado con la propia Catedral de Toledo, que, "evidentemente", muestra una sensibilidad especial por la ciencia y el conocimiento.
Además, se ha señalado que debió tener relaciones muy directas con el ejército y, seguramente, con algún hecho de armas concreto que está plasmando en estas tablas, y que debía mantener algún tipo de vinculación también con la monarquía castellana, lo que le hace conocer la corte y le permite plasmar incluso las figuras de los monarcas (aparentemente con dos de sus hijos) en otra de las tablas.