Las nuevas estrellas Michelin se han vuelto a olvidar de las mujeres. Los prestigiosos galardones de alta cocina que organiza la Guía Michelin han otorgado este año una estrella por primera vez a 29 restaurantes; la segunda estrella a tres; y la tercera a otros dos. Ninguno de estos premios lo ha recibido un restaurante regentado exclusivamente por una mujer. En España, solo 24 restaurantes de los más de 200 con una más o estrellas están liderados por una mujer.
La presentación este martes de la Guía Michelin España y Portugal 2023, en Toledo y con actuación de Rozalén incluida, entregó el tercer brillo al restaurante Atrio, en Cáceres, del chef Toño Pérez, y a la Cocina Hermanos Torres, de Sergio y Javier Torres. Con esta distinción, España cuenta ya con 13 restaurantes con la triple estrella Michelin, solo uno de ellos con una mujer al frente de los fogones (Elena Arzak, que comparte la cocina con su padre, Juan Mari).
La guía ha otorgado este año la segunda estrella a otros tres restaurantes, que tampoco tienen al frente a ninguna mujer. Son Deessa, en Madrid, del chef Quique Dacosta; Pepe Vieira y su restaurante homónimo en Serpe (Pontevedra); y El Rincón de Juan Carlos, del cocinero Juan Carlos Padrón, ubicado en Adeje, Tenerife. Una única mujer dirige un restaurante con dos estrellas en el país: Fina Puigdevall, chef de Les Cols, en Olot.
En la foto de la gala de anoche apenas se adivinan los rostros de dos mujeres entre todos los premiados. Son Mariana Sánchez, que dirige junto a su compañero Gonzalo Baquedano el restaurante Ajo Negro, en Logroño, que este año ha obtenido su primera insignia; y Lydia del Olmo, que acompaña en los fogones al cocinero Xosé Magalhaes en el restaurante Ceibe, en Ourense, que también obtuvo ayer su primer reconocimiento.
Hay otros tres restaurantes premiados en la nueva guía en los que las mujeres tienen un papel importante, aunque no al frente de la cocina. En Gente Rara, de Zaragoza, Sofía Sanz es la maitre del restaurante y socia del chef Cristian Palacio; en Código de Barra, en Cádiz, Paqui Martínez es la jefa de sala del local que dirige su marido, el holandés León Griffioen; y en COME by Paco Méndez, Errina Marciano es también socia y pastelera.
Hasta ahí llega la presencia de mujeres en una larga lista de premiados de alta cocina que cada año pone sobre la mesa la llamativa ausencia femenina en la distinción de la gastronomía.
En el mundo, las primeras chefs en obtener las tres estrellas, el máximo premio de la guía, en 1932 fueron Marie Bourgeois y Eugénie Brazier y hasta 1985 solo una mujer más, Marguerite Bise, volvió a obtenerlo. La primera española en ser reconocida por el galardón con las tres estrellas fue la chef Elena Arzak, hija de Juan Mari Arzak, en 1989. Tuvieron que pasar 30 años para que otra mujer en España lograra esas tres distinciones. Lo consiguió Carme Ruscalleda en 2019, con su restaurante Sant Pau, después de obtener la primera en 1988 y la segunda en 2006.