El movimiento ciudadano 'Queremos saber toda la verdad sobre Puy du Fou' es una iniciativa con la que diversos colectivos de Toledo quieren poner en entredicho el “apoyo ciego” que a su juicio han ofrecido las administraciones -Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha y el Ayuntamiento- al proyecto que la empresa francesa del mismo nombre quiere hacer realidad en esta ciudad a partir del próximo año: un parque temático sobre la historia de España.
Esta iniciativa obtuvo la Declaración de Interés Regional por parte del Gobierno de Emiliano García-Page el pasado mes de agosto y actualmente se encuentra en período de información pública tras la aprobación inicial de la Junta como Proyecto de Singular Interés (PSI). En este período, que estará habilitado hasta el próximo 12 de abril, se podrán presentar las alegaciones que se estimen al proyecto por parte de las instituciones, colectivos o personas afectadas por el mismo.
Debido a la magnitud de la documentación del proyecto y a las dudas que se han ido planteando desde que se diese a conocer la intención del grupo francés de llevarlo a cabo, ha surgido este movimiento ciudadano que este viernes ha ofrecido la primera charla informativa a la que ha acudido un centenar de personas y en la que, de la mano de diversos ponentes, han abordado por temáticas el impacto que puede llegar a tener Puy du Fou en Toledo y “los 15.000 folios” que comprende el proyecto.
En este sentido, el portavoz de Ecologistas en Acción en Castilla-La Mancha, Miguel Ángel Hernández, que rechaza este “apoyo ciego” de las administraciones, explica que en el terreno urbanístico y medioambiental, Puy du Fou presenta distintos aspectos que conducen, por ejemplo, “a la inseguridad jurídica y la incompatibilidad urbanística”.
Así, sobre el aspecto urbanístico, Hernández destaca la situación en la que se encuentra Toledo con su Plan de Ordenación Municipal (POM) de 2007, con una sentencia judicial que lo anula pero que está pendiente de que el propio Consistorio ejecute finalmente esta decisión. “Estamos a la expectativa de qué va a sustituir ese POM”, indica Hernández al tiempo que lamenta que no quede “claro el ámbito urbanístico en el que se mueve el proyecto”.
El terreno elegido para llevarlo a cabo, en la Finca Zurraquín -a pocos kilómetros del centro de Toledo-, ofrece una calificación de suelo rústico de protección forestal, paisajístico y de dominio público hidraúlico. “La actuación que plantean va a afectar directamente al paisaje, a zonas de protección y otros valores naturales y de conservación. Es un escenario claramente de inseguridad jurídica, no está en absoluto claro y el PSI no lo explica como debería”, subraya el representante de Ecologistas en Acción sobre el impacto que puede tener el parque en zonas próximas con especies protegidas de fauna.
El proyecto comprende parcelas de propietarios privados que, según se indica en la propia memoria del PSI, en el supuesto de que Puy du Fou “no lograra adquirir los referidos terrenos por acuerdo con sus actuales propietarios, se propone, como modo subsidiario de adquisición, la tramitación del correspondiente expediente de expropiación por parte de las autoridades competentes”.
“A nadie se le escapa que en este tipo de proyectos, la mayor parte tiene asociado una infraestructura hotelera, una parte del negocio que daría mucho dinero, ellos no lo ponen en el proyecto y no se puede garantizar que sea así”, indica Hernández sobre el impacto que pueda tener el ideario turístico de Puy du Fou en el turismo de Toledo. “Se reserva mucho más terreno del que es meramente para el desarrollo del parque”, agrega.
Impacto medioambiental
De esta manera, Hernández alude a las dimensiones del proyecto, “más de 400 hectáreas” en las que Puy du Fou ha previsto contar con más de un millón de espectadores al año. “Será una actividad que no descanse ni de día ni de noche. Desde luego, hay pocas cosas más incompatibles con la preservación, sobre todo de la fauna, que una actividad intensiva de tal magnitud”, razona.
“Ahí se va a generar un efecto vacío. Hay especies protegidas como rapaces, que se encuentran en zonas con peligro de extinción, tales como el águila imperial o el águila perdicera. Además, es una zona que está también en el punto de mira del lince, un entorno que tiene una capacidad de acogida para la diversidad enorme. Espacios forestales y bosque mediterráneo rodeado de cultivos, donde abundan los conejos”, ilustra Miguel Ángel sobre la situación ambiental de la zona en la que se ubicará el parque temático.
Con este panorama, Hernández considera que “el emplazamiento no es el adecuado” ya que estas zonas “perderán valor paisajístico”. No obstante, afirma comprender la cercanía a un centro de influencia como es Toledo, “zona del área metropolitana de Madrid, foco y atracción turística por donde pasan cientos de miles de turistas al año”.
El único hecho diferencial para no haber escogido otro espacio, pues llegaron a plantear otros dos, en Escalona y en un lugar desconocido de los Montes de Toledo, ambos incluidos en la Red Natura 2000, es, a juicio de Hernández, que esa zona precisamente es de suelo de protección”, remarca el experto al tiempo que recalca que el “elemento más importante” para esta elección ha sido “el económico” ya que “ese suelo sale más barato” y las cesiones que han de cederse para ubicar servicios públicos “son menores”.
Abastecimiento de agua
Otra de las cuestiones por las que el portavoz de Ecologistas en Acción ha mostrado sus dudas es por el abastecimiento de agua que requerirá el parque, unos cálculos que ya fueron replanteados por la propia empresa. La cifra de la memoria actual establece un consumo de unos 180.000 metros cúbicos (m3) al año, un gasto equivalente “al de una ciudad de mil habitantes”, dice Hernández, que aunque afirma que sería la empresa Tagus la que suministraría el agua desde Toledo.
“Nos parece muy peligroso aumentar la demanda de agua del Ayuntamiento en una situación en la que se están viendo momentos muy comprometidos para dar de beber a la gente, que resulta que es la prioridad, y no gastarla en espectáculos circenses, que es de lo que se trata esto”, reprocha el biólogo. Así, aunque reconoce que no es una cantidad de agua desorbitada la que establecen, sí destaca que si llega “un momento de sequía”, se podría “perjudicar a la ciudad de Toledo” en cuanto a su disponibilidad de agua para consumo humano.
¿Cómo se va a financiar el parque?
Otra de las preocupaciones en torno al proyecto tiene que ver con el esquema financiero presentado por los promotores. “No sabemos cómo van a hacer efectivas las garantías”, señala José Esteban Chozas, miembro de Podemos Toledo y ponente de esta cuestión en la charla planteada. “Hay cosas sorprendentes. Como la cuestión económica y financiera del parque”.
Chozas duda de la propuesta que refleja la Memoria del proyecto, según la cual Puy du Fou aportaría 32 millones de euros (el 34,8% del total de los fondos propios previstos) sobre una inversión que solo en las fases de construcción a cinco años supondrá 204 millones de euros (tal y como explicaron en rueda de prensa) aunque los promotores solo hablen en la Memoria presentada a la Junta de una necesidad financiera de 197 millones.
Los promotores explican que buscan “socios con un horizonte de permanencia a largo plazo y que fueran sensibles con el enfoque, tanto conceptual como económico, del Puy du Fou”. Los accionistas deberán aportar 60 millones, aunque no se concreta quiénes son o serán. Además buscarán 105 millones de euros en forma de deuda con financiación tanto bancaria como no bancaria.
Otra parte de la financiación apunta a “negociaciones con los proveedores, proponiendo que éstos financien parte del proyecto durante períodos de tiempo sensiblemente mayores a los habituales en el sector” o la solicitud de “incentivos regionales para la corrección de desequilibrios económicos interterritoriales del Ministerio de Hacienda y Función Pública, considerando que la inversión reúne las características sociales y económicas del programa”. Una subvención que definen a “fondo perdido” y que inyectarían entre 10 y 20 millones. “Tendrán que explicar cómo van a hacer todo esto. Los datos son cuanto menos curiosos”, señala Chozas, quien apunta además a “la necesidad de una expropiación forzosa de urgencia”
Además, hay susceptibilidad en cuanto al capital social inicial declarado por la empresa (3.000 euros y una sociedad unipersonal). ”Eso no puede dar tranquilidad a nadie. Si se lo da al Gobierno regional…Alguien que en teoría que viene a invertir más de 400 millones de euros y que entre la primera y la segunda fase quiere poner 32 millones partiendo de ese capital social, me parece sorprendente”.
Las dudas sobre el empleo y el modelo socio-económico para Toledo
Los impulsores del movimiento ‘Queremos saber toda la verdad sobre Puy du Fou’ se cuestionan también si el que representa el proyecto empresarial es “es modelo socio-económico que queremos para Toledo”. Xohana Bastida, también miembro de Podemos Toledo se pregunta: “¿Queremos un modelo en el que vengan grandes empresas a las que demos grandes subvenciones o por lo menos exenciones de impuestos o no sería mejor fomentar un crecimiento desde abajo apoyando las iniciativas de la gente?”.
Pone el ejemplo de algunas personas que quisieron poner en marcha un proyecto apícola en la misma zona que ocupará el parque temático “y no les han dejado. Si lo hubieran hecho hubieran tenido que pagar todos sus impuestos”. Bastida critica que “no se deje a la gente desarrollar sus propias iniciativas pero llega una gran empresa, con un proyecto insostenible desde muchos puntos de vista, con el peligro de fracasar y tengamos que asumir las cargas entre todos y a ese se le allana el paso”.
A este colectivo le preocupan también las condiciones laborales que pueda “imponer” la empresa francesa. En sus dudas apuntan al parque que ya existe en Francia: el 15% son trabajadores indefinidos, el mismo porcentaje de fijos-discontinuos y un 70% de temporales. “Es un modelo caro para la ciudadanía. Eso implica que tienen trabajo un tiempo y el resto viven del paro que pagamos entre todos”.
Durante un encuentro con la prensa en enero, los responsables del proyecto anunciaron que en 2019, el primer año de funcionamiento del parque (con un único espectáculo nocturno en funcionamiento) se contrataría a 89 personas a tiempo completo a los que se sumarían otros, según dijeron por el “efecto arrastre” del parque temático. En 2021, se llegará a los 689 empleos a tiempo completo además de casi 2.000 indirectos. En 2028, se espera la creación de 3.329 empleos en la zona.
“También dicen que en el espectáculo nocturno van a intervenir 150 actores. Serán personas contratadas por horas o por días. ¿Qué tipo de empleo estamos fomentando?”, se pregunta Bastida.
El impacto en el turismo y en la Ciudad Patrimonio de la Humanidad
Otra de las preocupaciones del colectivo tiene que ver con los impactos del parque en el sector turístico de Toledo. “No sabemos si va a detraer turismo de una ciudad de verdad, con 4.000 años, para llevarlo a un decorado de cartón-piedra. O si va a atraer a más gente a un Casco Histórico ya colapsado. A lo mejor deberíamos dedicar dinero público a fomentar otro tipo de turismo con lo que ya tenemos, con una oferta más innovadora”.
También cuestiona la posible propuesta sobre el modelo histórico que presenta. Hay una “polémica”en Francia, asegura Bastida. “Hay críticas muy serias de historiadores que hablan de que se da una versión de la historia bastante deformada”. El parque francés se encuentra en la región de La Vendée. Históricamente fue un reducto monárquico y católico en plena Revolución Francesa. “El consenso académico es que la visión que se da en el parque no se ajusta a la realidad histórica”.
“Philippe de Villiers es de extrema derecha y tiene libros publicados cuya columna vertebral es el ‘anti-Islam’, preconiza la prohibición de construir mezquitas en Francia. ¿Esta es la idea que queremos trasladar del Toledo de Las Tres Culturas cuando tenemos una riqueza inmaterial que es el Toledo de la tolerancia?”, se pregunta para añadir que en el estudio de público objetivo presentado por la empresa se habla de escolares como público preferente. “¿Es la historia que queremos enseñar a los escolares?, cuestiona Bastida.
“Espectáculos pseudohistóricos yo no los veo en una ciudad donde puedes ver un Greco, un Goya o introducirte en la historia y Puy du Fou es espectáculo: mucha agua, caballos y fuego”, sostiene Chozas.
Las dudas sobre las visitas al parque
“No hay un estudio de viabilidad serio”, dice Bastida, sino un estudio de mercado que considera a la población residente y a los turistas en un radio de hasta 180 kilómetros en coche y aplica ratios de penetración o de asistencia “que son suposiciones” frente a los datos del parque francés. Y es que, dudan de las cifras atendiendo a un informe de 2017 del director general del parque, Laurent Albert, que recoge que, desde la apertura del espectáculo nocturno en Francia, en 1978, las visitas han superado los 12 millones de personas. “No podemos considerar que esas cifras con 40 años de funcionamiento son aplicables a Toledo. ¿Cómo podemos pretender tener aquí 1,2 millones al tercer año? Es irreal”.