La última Resolución de la Delegación Provincial de Sanidad en Toledo con la que se prorrogan por diez días más las medidas restrictivas de nivel 3 en la capital regional expone una serie de datos que permiten conocer mejor la realidad a la que se enfrentan los hospitales de la Gerencia de Atención Integrada de Toledo respecto a la atención de pacientes con COVID-19. En concreto, se indica que, a fecha 12 de noviembre de 2020, "el porcentaje de camas de UCI ocupadas por enfermos de COVID-19 ascendía al 52,9% en la Gerencia de Atención Integrada de Toledo".
Ese día, los datos que publica diariamente el Gobierno regional a través de la Dirección General de Salud Pública indicaban que había en la provincia de Toledo un total de 35 pacientes en UCI que necesitaban respirador. En esa cifra se cuentan los pacientes atendidos en las UCI del Hospital Virgen de la Salud, el Hospital Provincial, el Hospital Nacional de Parapléjicos -estos tres ubicados en la capital regional- y el Hospital Nuestra Señora del Prado de Talavera de la Reina. Sin embargo, no se precisa el número de pacientes que se atienden en las UCI de cada uno, pero sí los que hay en cama convencional.
Por otra parte, en dicha Resolución, a la que ha tenido acceso este medio, se precisa también que ese 12 de noviembre el porcentaje total de camas convencionales ocupadas por pacientes COVID-19 ascendía al 27,5% del total. Según los datos de ese día, en la provincia de Toledo se atendía a 394 pacientes con coronavirus en cama convencional. De ellos, 275 estaban en el Hospital de Toledo, 117 en el Hospital de Talavera de la Reina y 2 en el Hospital Nacional de Parapléjicos.
De esta manera, atendiendo al porcentaje que se refleja en dicha Resolución, el pasado jueves se atendía en la Gerencia de Atención Integrada de Toledo a 277 pacientes con COVID-19, por lo que cabe interpretar que el número total de hospitalizados en cama convencional en la capital regional era superior a 1.000.
Cabe recordar que el pasado mes de marzo, el Complejo Hospitalario Universitario de Toledo incrementó en 40 el número de camas para pacientes críticos, lo que representaba un crecimiento del 125 por ciento, para dar respuesta al aumento de ingresos provocados por el coronavirus. En concreto se pasó de 32 puestos a un total de 72. En el Virgen de la Salud se instalaron 23 más, 5 en el Provincial y otras 12 en Parapléjicos.
"Muy por encima de los umbrales de alerta establecidos en Castilla-La Mancha"
De otro lado, entre las semanas epidemiológicas 44 y 45 -del 26 de octubre al 8 de noviembre- se declararon en el municipio de Toledo un total de 651 casos de COVID-19 (329 y 322 en cada semana) lo que supone una tasa de incidencia acumulada en los últimos 14 días de 767 casos/100.000 habitantes. Además, del total de esos casos, 117 casos se detectaron personas con 65 y más años de edad -casi el 18% del total-, lo que supone una tasa de incidencia acumulada en los últimos 14 días de 817,3 casos/100.00 habitantes mayores de 64 años.
Por otra parte, también se da a conocer que desde la semana 41 el porcentaje de pruebas diagnósticas positivas de infección activa en la Gerencia de Atención Integrada de Toledo se sitúa en torno al 20% (21,4% en las semanas 45 y 46).
Por ello, la Delegación Provincial de Sanidad indica en la Resolución que la tasa de incidencia acumulada en los últimos 14 días (próxima a 800 casos por cada 100.000 habitantes), las elevadas tasas de incidencia en personas con 65 y más años de edad y el peso relativo ascendente de este grupo de edad sobre el total de casos se sitúan "claramente muy por encima de los umbrales de alerta establecidos en Castilla-La Mancha". "Asimismo, tanto el porcentaje de pruebas diagnósticas positivas como la ocupación hospitalaria por enfermos COVID-19 se sitúan en unos niveles preocupantes", añaden en este documento.
"Estos indicadores ponen de manifiesto que no se ha observado ninguna mejoría respecto al último informe -del 5 de noviembre-, permaneciendo el municipio de Toledo en un escenario de transmisión comunitaria intensa, lo que exige la adopción de medidas complementarias a las medidas generales aplicadas por la Consejería de Sanidad en todo el territorio regional", apunta la Resolución, en la que recuerdan que la evidencia científica ha constatado que la transmisión del virus es "mucho más intensa en espacios cerrados", motivo por el que se reforzaron las medidas de nivel 3 que impiden ahora por ejemplo al sector de la hostelería mantener su actividad en el interior de los establecimientos.