Los agentes que prestan servicio en horario nocturno en el edificio de la Delegación del Gobierno de Castilla-La Mancha, situado en la Plaza de Zocodover de Toledo, “sufren prácticamente a diario unas temperaturas superiores a 30ºC”, según ha denunciado la Asociación Unificada de Guardias Civiles (AUGC), cuando el límite legalmente establecido está en los 27ºC.
Explican que se debe a que durante casi todo el día, el sol da sobre la fachada y se generan unas temperaturas tan elevadas que dificultan el trabajo incluso por la noche. En ese momento el sistema de sistema de climatización central del que dispone la Delegación del Gobierno “siempre permanece apagado entre las 23 y las 7 horas. Sea verano o invierno”. Es algo que se repite en invierno con “apagones” en el sistema en la misma franja horaria.
Los guardias civiles destinados en el edificio y que trabajan en horario nocturno “sobrellevan” los meses más fríos con mantas y aparatos que llevan de sus propias casas, explica la asociación, pero el “problema surge en los meses estivales, cuando las elevadas temperaturas pueden ocasionar golpes de calor o estrés térmico”.
Según la AUGC, este modo de proceder se debe, supuestamente, a las quejas de los vecinos por el ruido que emite el sistema de climatización cuando está en funcionamiento.
La Delegación de Toledo de la Asociación Unificada de Guardias Civiles ha enviado un escrito y un informe a la Oficina de Riesgos Laborales de la Delegación del Gobierno de España en esta comunidad autónoma para que no se desactive por la noche el aire acondicionado ni la calefacción en invierno.
De no ser posible, añaden, “hemos pedido que den las instrucciones pertinentes para la instalación de un aparato individual o portátil de aire acondicionado con bomba de calor”. Recuerdan que la Delegación del Gobierno “tiene la obligación de velar por la seguridad de los trabajadores” y eso incluye propiciar una temperatura adecuada conforme a la normativa vigente en materia de riesgos laborales. “Al superar los 27ºC estipulados por Ley, puede provocar una clara situación de estrés térmico”.
También aseguran que al carecer de equipos de climatización no se garantiza ni el nivel de humedad que se debe de mantener ni tampoco la renovación del aire, aspectos ambos delimitados por el Real Decreto 1618/1980, de 4 de julio, por el que se aprueba el Reglamento de calefacción, climatización y agua caliente sanitaria, y por el Real Decreto 486/1997, de 14 de abril, por el que se establecen las disposiciones mínimas de seguridad y salud en los lugares de trabajo y que establece en su anexo III las condiciones ambientales de los lugares de trabajo.
En su artículo tercero se dispone que en los locales de trabajo cerrados deberán cumplirse condiciones de temperatura específica si se realizan trabajos sedentarios propios de oficinas o similares que estará comprendida entre 17º y 27ºC. La temperatura de los locales donde se realicen trabajos ligeros estará comprendida entre 14º y 25ºC y la humedad relativa estará comprendida entre el 30% y el 70%, excepto en los locales donde existan riesgos por electricidad estática en los que el límite inferior será el 50%.
La Delegación de AUGC ya trató este tema en una reunión con la Subdelegación de Gobierno de Toledo en el mes de junio de 2021. “No se ha dado solución al problema”, lamentan, de ahí que ahora se haya remitido un escrito junto a un informe a la Oficina de Riesgos Laborales de la Delegación del Gobierno de España en Castilla-La Mancha.
"En vías de solucionarse"
Fuentes de la Delegación del Gobierno consultadas por elDiarioclm.es confirman que el aire acondicionado se apaga por la noche "por respeto" a los vecinos de la zona debido al ruido que genera el actual sistema de climatización.
Las mismas fuentes aseguran que el problema está "en vías solucionarse", ya que cuando se conoció la denuncia de la AUGC "se dio orden de instalar un sistema portátil de climatización" y en estos momentos se está "a la espera" de que la empresa suministradora proceda a su instalación.