Como un “avance extraordinario” ha calificado el consejero de Agua de Castilla-La Mancha, Francisco Martínez Arroyo, la aprobación del nuevo Plan Hidrológico del Tajo aprobado en el Consejo del Agua con el voto a favor de la comunidad autónoma. Aunque todavía hay margen de mejora, recalcó, se debe destacar que es la “primera vez” que la región forma parte de la toma de decisiones relacionadas con el río. “Se nos está tomando en cuenta, es curioso que las comunidades que no están en las demarcaciones del Tajo están hablando de un río que no pasa por su territorio. Es hora de que hablemos del río Tajo, de lo que supone para nuestra tierra”, señaló el responsable.
Mientras el Tajo vertebra “municipios y realidades”, el trasvase “rompe Castilla-La Mancha”. Por eso, Arroyo ha afirmado que ahora van a ser “exigentes en materia de agua” y que si los caudales ecológicos subirán es gracias a la sentencia del Tribunal Supremo que se ha recurrido desde Castilla-La Mancha, por las asociaciones que llevan “mucho tiempo defendiendo el río”. “Otra cosa es sobre el caudal que se establezca en la planificación, sobre lo que sí puede haber discusión, pero no sobre los caudales ecológicos mínimos. Hasta ahora era un caudal legal siendo paradójicamente ilegal”.
En Aranjuez, el caudal ahora mismo es de unos 6 metros cúbicos por segundo. La idea es que en 2027 sea de más de 8. “Es una cantidad muy importante para Castilla-La Mancha porque es un incremento muy sustancial”. Martínez Arroyo también criticó el voto negativo de la Comunidad de Madrid a este Plan, y lo calificó de ser “político, sin argumentos”. “Este caudal en Aranjuez supondrá un paso importante para la biodiversidad, y será un río vivo a su paso por Toledo”, recalcó.
En el caso de Toledo y Talavera de la Reina, otras ciudades del tramo medio del río, el objetivo que se ha puesto el Plan es que el caudal ecológico sea de más de 17 metros cúbicos y de más de 18, respectivamente. Actualmente, es de unos 10. “Es importante que circule más agua para que el río esté más vivo, el incremento de caudales es fundamental y un cambio de paradigma en la política del agua en Castilla-La Mancha y en España”, resaltó.
En Madrid se está "incumpliendo" la normativa en depuración
Por otra parte, Martínez Arroyo ha recordado que se acordó también una gran inversión en depuración en Madrid, donde se está “incumpliendo” la normativa. “Es trascendente”, señaló, puesto que beneficia “sobre todo” a Castilla-La Mancha. “No entendemos cómo la Comunidad de Madrid votó en contra de esta propuesta que supone la mayor inversión en depuración que se va a pagar con los impuestos de todos los españoles”, aseveró.
La depuración supondré una “mejora total”, en seis depuradoras de la zona sur de Madrid, que vierten al Jarama y que influirá también en la unión de este río con Toledo. “El Jarama tiene un caudal mucho más grande y vendrá más limpia, lo que repercutirá sin duda en el estado del río en Toledo y Talavera”, afirmó.
En cuanto a los regantes del Alberche, el consejero resaltó que se ha conseguido una “inversión muy importante” de 16 millones de euros que se van a invertir para mejorar el regadío “más grande” de la cuenca del Tajo en Castilla-La Mancha. De forma paralela, insistió, se están haciendo más inversiones que repercutirán en el bienestar del río, como los mil millones de euros en las desaladoras. “Es necesario garantizar el agua en Levante”, recalcó, porque el objetivo es que no se vuelva a regar con agua del Tajo en esa zona.
También apeló a la solidaridad para mantener el abastecimiento en la zona del Alto Guadiana. “Hay que hacer el esfuerzo y cada vez más castellanomanchegos entienden esta realidad”, resaltó el consejero, en relación a la tubería manchega. Además, insistió en que no es lo mismo un trasvase de 38 hm3 que uno de uno hectómetro cúbico para beber. “Son realidades distintas”, afirmó.