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Concentración del personal de los laboratorios del Hospital de Toledo / Imagen: Fidel Manjavacas
Los trabajadores y trabajadoras del Servicio de Anatomía Patológica del Hospital Universitario de Toledo se han encontrado en la mañana de este martes, a las 7.00 horas, un cartel en la puerta de la zona de tallado, donde se manipula el formaldehído, que anunciaba el cierre de la actividad de este servicio, según han informado los delegados y delegadas de prevención del centro hospitalario.
Fuentes sindicales consultadas por este medio explican que la decisión la ha tomado la Inspección de Trabajo. “Hemos pasado del no hay nada porque no existe nada del consejero de Sanidad, a la paralización de esta parte del servicio donde se manipula el formaldehído, el compuesto químico que ha salido con niveles por encima de rango en varias mediciones”, apuntan, para lamentar que el resto de zonas continúan con la actividad “como si nada estuviera sucediendo”.
Interpretan que la decisión pone de manifiesto “que hay riesgo grave e inminente para la salud de los trabajadores”.
En un comunicado, afean tanto a la Gerencia del centro como al Servicio de Salud de Castilla-La Mancha (SESCAM) que se hayan “subestimado los riesgos para la salud” de los empleados y empleadas. En este aspecto, recuerdan que “continúan enfermando y acudiendo al servicio de Urgencias y a la mutua”.
Este martes han vuelto a reclaman el cierre de la actividad de “todo” el servicio del Laboratorio de Anatomía Patológica del Hospital “para asegurar la salud de todos los trabajadores y trabajadoras”.
El Hospital está ultimando un "plan de contingencia"
Desde el hospital de Toledo han informado de que se está ultimando “un Plan de Contingencia con todos los recursos necesarios, tanto internos como externos, para que la actividad asistencial no se vea afectada” tras la decisión de la Inspección de Trabajo de ordenar la paralización inmediata de “únicamente aquellas tareas que impliquen la manipulación, contacto y exposición al formaldehido en la sala de tallado del laboratorio de Anatomía Patológica del Hospital Universitario de Toledo, exceptuando el procesado y análisis de muestras intraoperatorias”.
En este sentido, explican que tras la reunión mantenida este lunes entre representantes del equipo directivo del Hospital con la Inspección de Trabajo, a última hora de la tarde del lunes se recibió notificación de este organismo, dando un plazo de tres días para presentar un recurso ante esta decisión.
Según indica el escrito de la Inspección, “la paralización se mantendrá vigente hasta que se adopten por la empresa todas y cada una de las medidas preventivas que estimen necesarias para proteger adecuada y eficazmente a los trabajadores del laboratorio contra los riesgos relacionados con la exposición al formaldehído en su trabajo”.
Hoy la Gerencia del Complejo Hospitalario Universitario de Toledo sostiene, frente a las críticas de los delegados y delegadas de prevención, que ha actuado “con total transparencia, tanto con los profesionales como con la población en general y ya está trabajando en el desarrollo de un Plan de Contingencia para que las pruebas que se necesiten puedan seguir siendo analizadas, asegurando el correcto funcionamiento de la asistencia sanitaria”.
Detallan que se ha informado a los trabajadores en el Comité de Seguridad y Salud Laboral, en reuniones con los delegados de prevención de riesgos laborales, con los jefes de servicio y con los propios profesionales de los servicios.
Una nueva reunión con el Comité de Salud Laboral el jueves
Además, está convocada una nueva reunión del Comité de Salud Laboral del Hospital Universitario de Toledo el próximo jueves. “Todos ellos han sido puntualmente informados de todas evaluaciones, mediciones y demás análisis que se han venido realizando en este tiempo tanto de forma interna como con el apoyo de empresas externas”, asegura la Gerencia del centro hospitalario.
“Incluso se ha habilitado en la intranet del hospital un apartado donde se han ido colgando los resultados de todas estas evaluaciones”, abundan.
Según los responsables del hospital, desde el 26 de noviembre “no se han dejado de realizar actuaciones técnicas de revisión de las instalaciones y del equipamiento y mediciones”, tanto en los servicios de Anatomía Patológica y Genética, como en Bioquímica y el Servicio de Transfusiones.
Además, añaden, “diariamente se han venido controlando las condiciones ambientales para garantizar la seguridad y salud laboral de los trabajadores”.
También se ha generado, adicionalmente, un mantenimiento diario sobre los conductos para el área de laboratorios, recolectando muestras y analizando los parámetros relacionados con la calidad del aire y sobre el funcionamiento de los diferentes sistemas de la instalación de climatización. Y por otro lado la Gerencia ha contado con la evaluación adicional de una empresa externa para la realización de mediciones de agentes químicos.
“En todo momento, todas las decisiones que se han ido adoptando por parte de la Gerencia del Complejo Hospitalario de Toledo han sido en base a los criterios técnicos y objetivos y a las recomendaciones de los expertos”, justifican.
“Esto ha sido así tanto cuando los valores de las mediciones estaban dentro de los estándares establecidos por la norma de referencia en cada caso, como a raíz de que el pasado 19 de febrero los resultados de las mediciones complementarias realizadas en Anatomía Patológica indicaran la detección puntual en algunas de las muestras de niveles de formaldehido por encima de lo recomendado en la sala de tallado y en el laboratorio”.
Los bomberos de Toledo también realizaron mediciones
El pasado 20 de febrero los bomberos del Parque de Toledo acudieron a medir para realizar mediciones de gases en las instalaciones de los laboratorios y procedieron a tomar muestras de cuatro parámetros: nivel de oxígeno, nivel de monóxido de carbono, ácido sulfhídrico y atmósferas explosivas.
“En ninguna instancia inspeccionada los detectores de gases empleados marcaron valor alguno, excepto el de oxígeno, que registraba un valor normal”, aseguran desde el hospital.
Posteriormente, ya el día 21 de febrero, se implementaron nuevas acciones, a raíz precisamente de esa detección puntual y hoy, tras la decisión tomada por la Inspección de Trabajo explican que “se seguirán adoptando medidas para la mejora de la seguridad y salud de los trabajadores del Hospital Universitario de Toledo”.
CCOO asegura que lo advirtió ya en junio de 2023
El sindicato CCOO ha dado a conocer que la decisión de la Inspección de Trabajo se ha producido tras la denuncia interpuesta por este sindicato. Desvela que el valor límite de exposición al formaldehído reglamentariamente establecido en el anexo III del Real Decreto 665/1997, de 12 de mayo, sobre la protección de los trabajadores contra los riesgos relacionados con la exposición a agentes cancerígenos durante el trabajo (BOE de 24 de mayo) es para exposiciones de larga duración 0,37 mg/m3, y de 0,74 mg/m3 para exposiciones de corta duración (15 minutos).
Según las mediciones realizadas, en el Laboratorio de Anatomía Patológica, sala de tallado, hay un índice de exposición (I) de 5,4 veces el valor límite para la exposición diaria previsto reglamentariamente para el formaldehído en el muestreo realizado el 28 de enero; y de 3,1 veces el valor límite para la exposición diaria previsto reglamentariamente para el formaldehído en el muestreo realizado el 29 de enero.
La Federación de Sanidad y Sectores Sociosanitarios de CCOO Toledo asegura que viene advirtiendo desde junio de 2023 de “la existencia de diferentes tipos de incidencias relacionadas con la atmósfera”. También que se reclamó la medición de partículas y en última instancia, ante el agravamiento de la situación desde el pasado mes de noviembre, la paralización de la actividad ante el riesgo para la salud que estaba suponiendo para las personas trabajadoras. Una treintena de ellas han tenido que tramitar la baja laboral, según ha recordado José Ángel Díaz, delegado de prevención del área sanitaria 1 de Toledo.