La iglesia de Santa Eulalia de Toledo vuelve a ofrecer visitas guiadas

Iglesia de Santa Eulalia. Foto: Consorcio de Toledo

La Asociación de Guías Oficiales de Turismo de Castilla-La Mancha (APIT CLM) vuelve a ofrecer a partir de este sábado, 9 de abril, visitas guiadas a la toledana iglesia de Santa Eulalia, a fin de mostrar los "tesoros" hallados en este templo mozárabe tras un largo proceso de restauración y rehabilitación. Mientras tanto, Atempora Arqueología, empresa encargada de la intervención, trabaja en diseñar un espacio interpretativo del subsuelo para museizarlo.

Así lo ha explicado a Europa Press Laura García, una de las guías que se encargará de este recorrido, que ha recordado que fue en 2018 cuando comenzaron las obras en esta parroquia para solucionar los problemas de humedad que la acechaban.

Al retirar el suelo para instalar la calefacción por hilo radiante, apareció en antiguo cementerio parroquial, lo que indicaba que la obra se iba a alargar y, por tanto, que "había que buscar alguna vía para cubrir los gastos ocasionados".

Por ello, y a iniciativa del propio párroco, Javier Hernández, APIT CLM organizó visitas guiadas para que todas aquellas personas interesadas pudieran ver la evolución de la intervención, a la vez que contribuían a ella.

"La gente respondió muy bien. Ahora, tras el parón del COVID y con toda la intervención prácticamente terminada, nos ha parecido muy interesante volver a enseñar la iglesia para que la gente pueda ver el antes y el después y, sobre todo, para difundir lo descubierto en la excavación".

Todos los sábados y domingos de abril

Será a partir de hoy cuando se retomen estas visitas, que se prolongarán a lo largo de los sábados y domingos del mes de abril, en dos sesiones, la de las 17.00 y la de las 18.30 horas.

"La visita dura cerca de una hora y cuarto y se hará en grupos de unas 25 personas. En caso de que haya demanda se ampliarán a más meses", ha avanzado García, que ha añadido que el 50% de los 10 euros que cuesta la visita irán destinados a financiar la obra. Los interesados tendrán que hacer reserva previa a través del número de teléfono 696147288.

En cuanto a lo que van a descubrir los visitantes, la guía ha detallado que podrán disfrutar de espacios litúrgicos que se han recuperado para el culto mozárabe y que se habían ido perdiendo con el paso de los siglos por las diferentes intervenciones que ha sufrido la parroquia.

Interior de la iglesia de Santa Eulalia, en Toledo. Foto: Portal de Cultura de Castilla-La Mancha

Respecto a la parte inferior, donde estaba el cementerio parroquial, se han vaciado tres criptas para habilitar nuevos espacios, que ahora albergan una piscina bautismal, para practicar el bautismo por inmersión, así como diversas reliquias, entre ellas el Lignum Crucis que sale en procesión en Semana Santa.

Casa islámica del siglo X

Por su parte, Samuel Rodríguez, responsable de Atempora Arqueología y codirector de esta actuación arqueológica urbana, ha detallado que, al hilo del proyecto de restauración y rehabilitación del templo para solucionar problemas de humedades se ha llevado a cabo una excavación de todo el espacio, que ha permitido documentar diferentes niveles de enterramiento y un importante nivel de escombros que estaba cubriendo los restos de una casa islámica de los siglos X u XI.

Dicho esto, ha indicado que una vez finalicen todos los trabajo y cuenten con todos los permisos precisos, la intención es mostrar el subsuelo, haciendo de él un espacio "vivo", a fin de dar a conocer todas las labores desarrolladas. "Trabajamos ahora en el diseño de un espacio interpretativo", ha avanzado.

Y es que la excavación desarrollada a cinco metros de profundidad ha descubierto, además de silos de la Edad del Bronce y restos de época romana, tres niveles de enterramientos, que se extendieron desde final del siglo XII, fecha de origen del templo, hasta finales del XVIII, cuando cerró sus puertas.

Esta intervención, capitaneada por Rodríguez y Javier Peces, ha permitido recuperar cerca de 200 restos de cuerpos, que formaban parte de la necrópolis de la parroquia. Una vez recuperados, han sido perfectamente catalogados y ubicados en un espacio que se ha habilitado para acogerlos.

"Se buscan espacios para que sigan descansando, pero no son meros osarios, sino espacios donde están perfectamente catalogados. Hemos sacado una muestra de todo el material de cada uno de los cuerpos, de los ataúdes o textiles, intentando sacar la máxima información posible para que no se pierda y que el día de mañana pueda a ayudar a futuras investigaciones", ha concluido.