La Diputación de Toledo en la que gobiernan PP y Vox ha formalizado un nuevo contrato con el Club Náutico de Ribadeo (Lugo) para mantener la estancia de un buque, propiedad de la Institución provincial, en las instalaciones de Marina Seca del club.
La formalización de la adjudicación, mediante un procedimiento negociado sin publicidad, se produjo el 15 de septiembre por un importe de 4.138,26 euros, impuestos incluidos, durante 18 meses.
Se trata del barco que fue construido por un astillero asturiano, bajo encargo de la propia Diputación de Toledo dentro de un proyecto para potenciar ‘Ciudad de Vascos’, un yacimiento arqueológico ubicado en una finca privada de la provincia de Toledo, en el término municipal de Navalmoralejo. Parte del proyecto, que fue anulado por los tribunales por diversas irregularidades, pasaba por ofrecer el servicio turístico en barco desde el embalse de Azután, a través del río Huso, un afluente del Tajo hasta el yacimiento.
El barco lleva casi una década varado en el Muelle de Porcillán a la espera de comprador. El Gobierno socialista en la Diputación Provincial ha intentado venderlo hasta en diez ocasiones en las dos últimas legislaturas, sin éxito. Incluso a pesar de haber rebajado a más de la mitad su precio inicial que ascendía a casi 350.000 euros pagados de las arcas públicas de la provincia de Toledo, bajo la Presidencia de Arturo García Tizón (PP).
Ahora el nuevo Gobierno de PP y Vox, que preside la ‘popular’ Conchi Cedillo, ha firmado un nuevo contrato que cubrirá los gastos de la estancia del barco en Lugo, a la espera de su destino definitivo.