La Archidiócesis de Toledo ha solicitado a los sacerdotes "evitar la dialéctica pública de confrontación" en torno a la declaración 'Fiducia supplicans', del Papa Francisco, que autoriza a bendecir a parejas formadas por personas del mismo sexo o divorciados y vueltos a casar.
En una comunicación dirigida a los sacerdotes, el Arzobispo de Toledo, Francisco Cerro Chaves, y su obispo auxiliar, Francisco César García Magán, solicitan mantener la "comunión eclesial con Jesucristo, que pasa por la comunión con el sucesor de Pedro", en referencia al Papa Francisco, según ha informado la Archidiócesis de Toledo por nota de prensa.
La comunicación llega tras la petición de varios sacerdotes de Toledo al Papa Francisco de anular 'Fiducia Supplicans', registrada en una plataforma digital de solicitud de firmas, que hasta este viernes había alcanzado los 7.164 apoyos.
En su comunicación, el Arzobispo y su Obispo auxiliar recuerdan que "el documento de Doctrina de la Fe participa del Magisterio ordinario del Papa, por llevar la firma del Sumo Pontífice", y plantean que "el tipo de documento elegido, como 'declaración', lo sitúa en la línea de otras intervenciones autorizadas que no pretenden proponer nuevas verdades de fe, sino más bien recordar cuestiones perennes, si acaso, actualizando alguna praxis eclesial que permita salvaguardar el depósito recibido en la Revelación".
En este sentido, solicitan "un esfuerzo por acoger esta palabra autorizada de la Iglesia", aunque constatan que "probablemente esto requerirá para algunos más tiempo, más consultas, y sobre todo, ese espíritu de prudente docilidad que se sitúa en la lógica de la obediencia de la fe", citando un versículo de la Biblia.
"La situación generada nos mueve a haceros algunas peticiones", plantean el Arzobispo y el Obispo auxiliar en la comunicación, entre las que destacan, junto a evitar la confrontación, "comprender el fondo del documento, con la necesaria acogida integral de la doctrina de la Iglesia".
En este sentido, afirman que "no se puede rechazar de plano, aunque por su naturaleza, pueda ser ulteriormente precisable", y recuerdan que "las indicaciones de los superiores apuntan a que es el ejercicio del discernimiento de cada pastor el que verifica si se dan unas sanas disposiciones de las personas que se acercan con una sencilla y humilde petición al respecto".
Finalmente, en su comunicación plantean que los sacerdotes no pueden quedarse "satisfechos con una actitud de distancia crítica de todo lo que el hombre de nuestros días vive y padece, muchas veces, de forma inculpable". "Pero tampoco podemos dejar de anunciar la verdad del amor de Dios Trinidad que ha propuesto caminos de santificación y plenitud para todos sus hijos. Hemos de acompañar, proponer la conversión y la vida buena del Evangelio, con corazón de pastores que saben conjugar verdad y bondad, misericordia y apremio por la salvación", añaden.