Toledo es una ciudad de desprendimientos. No es inusual que se produzcan en algún elemento patrimonial, como sus murallas, o en su entorno natural. Sin embargo, el Ayuntamiento no ataja a todos por igual. Mientras unos son rápidamente solventados con obras de emergencia y presupuesto municipal, otros no solamente no se arreglan sino que se niegan.
El portavoz del Gobierno municipal, Juan José Alcalde, llegó a afirmar esta semana que no conocía el caso de un bloque de viviendas del Paseo de la Rosa, en el barrio de Santa Bárbara, sobre el que suelen caer rocas, tierra y arbustos, tal y como recogió Toledodiario.es hace ya dos años, cuando comenzaron unos desprendimientos que han vuelto a repetirse. Y es que, el inmueble está construido a escasos dos metros de una de las laderas próximas al río Tajo, sobre la que descansa el Castillo de San Servando. Al igual que otros taludes de la ciudad, este contaba con una malla de contención que con el paso del tiempo se ha deteriorado y cuyo propietario, el Ayuntamiento, no ha arreglado.
Mientras otras infraestructuras de este tipo son revisadas, el Consistorio “no está por la labor de solucionar el problema” de estos vecinos y vecinas. “Los hechos se remontan al mes de diciembre del año 2022, cuando un fuerte desprendimiento dejó literalmente soterradas varias viviendas”, recuerda el presidente de la comunidad de este inmueble, José María Portero, quien muestra su sorpresa ante las declaraciones del portavoz del equipo de gobierno.
Sorpresa que comparte la concejala de Obras y Servicios, Loreto Molina, que a través de un comunicado aseguraba que no solamente está pendiente del peligro que sufre este edificio, sino que ha "visitado personalmente los daños ocasionados". La edil recuerda a su compañero de partido y de gobierno que el "Ayuntamiento ha realizado diferentes labores de seguimiento del estado del edificio y está trabajando en buscar una solución".
“En ningún momento hemos mirado para otro lado”, asegura la concejala que, sin embargo, no detalla cuándo y cómo se sustituirá la malla de contención que debería proteger a estas viviendas del barrio de Santa Bárbara. "En febrero yo personalmente estuve allí con el jefe de área de obras para observar cómo estaba la malla y cuál era la situación”, asegura. Dos meses después y tras nuevas lluvias, el edificio ha vuelto a sufrir la caída de numerosas rocas y tierra que no encuentran ningún obstáculo a su paso ya que se cuelan por los grandes agujeros que sigue teniendo la malla.
Según la edil, "los servicios municipales están pendientes de poner en marcha las actuaciones necesarias", entre las que no avanza que vaya a incluirse la sustitución de este elemento de contención que ya no evita el desprendimiento de rocas.
La comunidad ha llegado a presentar una denuncia ante el Defensor del Pueblo, debido a la inacción del Ayuntamiento, que tampoco ha dado respuesta a este organismo nacional.
“Llegamos a un acuerdo con el Secretario del Ayuntamiento en mayo de 2023 no obstante, con el cambio del equipo de gobierno, regresamos de nuevo al olvido y abandono”, lamenta Portero.
Tras la insistencia de los medios, el portavoz del Equipo de Gobierno, afirmó en una rueda de prensa que el “Ayuntamiento hará todo lo que tenga que hacer... Habrá que ver si es algo municipal o de algún vecino. Lógicamente, el Ayuntamiento, aunque sea de manera subsidiaria, lo tendrá que retirar... seguramente habrá llegado al buzón del ciudadano o a Obras pero a mí no me ha llegado".
Sin embargo, el nuevo Gobierno municipal de PP y Vox ya “declaró en varias ocasiones que había que solucionar el problema, de hecho en el mes de septiembre del año 2023 y con la DANA que azotó Toledo, se produjo un segundo desprendimiento que afectó a varias viviendas y las rocas fueron retiradas por el consistorio aunque sin arreglarse el origen del problema”, recuerda el presidente de la comunidad de propietarios, que ya demostró que tanto la ladera como la malla de contención son de titularidad municipal.
"Después de la DANA, los servicios municipales de bomberos se presentaron allí e hicieron una inspección y se realizó un informe del estado tras haber pasado este fenómeno meteorológico... se reforzó la vigilancia en esa zona porque éramos conscientes de que era un punto de alto riesgo”, reconoce la concejala de Obras.
“Nos merecemos un equipo de gobierno que vele por los intereses de los ciudadanos”
Desde que comenzaron los desprendimientos sobre este bloque de viviendas, sus vecinos y vecinas viven “con el alma en vilo por si las rocas vuelven a caer” ya que temen que puedan causar daños personales. Por el momento, ninguna persona ha resultado herida aunque sí se han producido daños materiales.
“Nos merecemos un equipo de gobierno que vele por los intereses de los ciudadanos… el Ayuntamiento se ha olvidado de nosotros aunque dijeron que solucionarían el problema”, subraya el presidente de la comunidad.
Portero critica al actual ejecutivo por “mirar para otro lado y eludir sus responsabilidades”. “Vivimos pendientes de que no se cuelen las rocas dentro de nuestras viviendas, incluso algunas de ellas se han tenido que tapar sus ventanas mermando la calidad de vida de estos vecinos”.