El concejal de Izquierda Unida-Podemos en el Ayuntamiento de Toledo, Txema Fernández, ha votado este viernes en contra de la aceptación de las alegaciones presentadas por la Asociación de Hostelería y Turismo (AHT) y Fedeto y del proyecto de ordenanzas fiscales que el equipo de Gobierno llevará a pleno el próximo 30 de diciembre.
En concreto, Fernández se ha mostrado en contra de aceptar que las ordenanzas fiscales “renuncien a recaudar dinero de los grandes establecimientos hosteleros” al incrementar hasta 4,2 millones el valor catastral de referencia a partir del cual se aplicará el diferencial al IBI.
Y es que, con la aprobación de la alegación de la AHT, se ha acordado una reducción del abanico de negocios de ocio y hostelería a los que aplicar el diferencial (finalmente +0,55% y no el 0,60%) sobre el IBI de modo que ya no afectará al 10% sino al 5% de los negocios que tengan un valor catastral superior a los 4,2 millones de euros cuando inicialmente se establecía un valor superior a los 2 millones.
El portavoz de Izquierda Unida expone que tras la lectura de las alegaciones de ambas entidades no ha encontrado "ningún informe que justifique perder la oportunidad de cobrar el impuesto, que pueden pagar, al 5% de los alojamientos hoteleros que hemos ‘perdido por el camino’”.
Seis establecimientos no pagarán el diferencial
Txema Fernández considera que la aceptación de esta alegación irá en detrimento de las arcas municipales, y por ende de los vecinos y vecinas de Toledo, ya que, según los cálculos, seis establecimientos de ocio y hostelería que inicialmente deberían pagar el diferencial ya no lo harán como el caso del Parador de Toledo cuyo valor catastral está por debajo de 4 millones de euros.
Pero es que además, Fernández considera que se trata de “una medida absolutamente desproporcionada e injusta” ya que afecta en mayor medida a los comerciantes dado que el gravamen puede afectar a unos 180 inmuebles dedicados al comercio mientras que sólo gravará a 6 negocios de ocio y hostelería.
Además, subraya que “para tender hacia la constitucional progresividad de los impuestos, el valor a cobrar a los hosteleros sobre los comerciantes debería ser 12 veces más alto” y recriminaba en la sesión extraordinaria de la Comisión de Hacienda celebrada ayer que la propuesta definitiva de las ordenanzas fiscales no contara con un cálculo de ingresos tras estas modificaciones.
Por otra parte y a la vista del contenido de las alegaciones de la AHT y Fedeto, Txema Fernández observa que las numerosas reuniones entre el equipo de Gobierno y los representantes de la AHT y Fedeto han derivado en un “pacto de desacuerdo” inicial para finalmente “acordar un punto intermedio aparentemente prefijado”.