El portavoz de Izquierda Unida-Podemos en el Ayuntamiento de Toledo, Txema Fernández, ha registrado una petición en la que solicita “la utilización de fuegos artificiales silenciosos en las exhibiciones pirotécnicas” con el objetivo de que estos espectáculos también puedan ser disfrutados por personas hipersensibles al ruido, por enfermedades como el autismo, y evitar el daño que sufren los animales ante el ruido y los efectos en el cielo que produce la pólvora.
“Los efectos negativos que provocan en la salud de las personas con Trastornos del Espectro Autista (TEA) y en los bebés, así como los animales, pueden evitarse tomando el ejemplo de ciudades españolas y europeas que han apostado por fuegos artificiales silenciosos”, explica Fernández, como Reino Unido, Argentina, Islas Galápagos, Tenerife, Nerja, Antequera o Dos Hermanas.
Los fuegos artificiales silenciosos no utilizan "proyectiles explosivos de gran calibre" y consiguen mantener "la belleza y espectacularidad en las coreografías y el uso del color”.
Y es que, tal y como considera IU-Podemos, no puede ser que el Ayuntamiento venda "la imagen de un Pacto por la Inclusión en Toledo, ciudad Amiga de la Infancia y Ciudad Amiga de los animales, y que sólo sea un anuncio”.
Por ello, la formación anima al Gobierno local a avanzar “en políticas reales que garanticen un cambio en el modelo social, en torno a la crisis climática, con la puesta en marcha de microacciones que se conviertan en acontecimientos que cambien tendencias”. “Es posible celebrar y mantener tradiciones adaptándolas siendo sostenibles y sin dañar la salud de las personas y de los animales”, subraya.
Según Fernández, la petición registrada “no va a salvarnos de esta emergencia climática, pero sí inicia un camino de cumplimiento de los Objetivos de Desarrollo Sostenible creando espacios inclusivos y ciudades generadoras de biodiversidad”.
Efectos de los fuegos artificiales en los animales
Desde IU-Podemos recuerdan que son numerosos los colectivos alertan sobre "los efectos nocivos que produce la pirotecnia" tanto en las mascotas como en el conjunto de la fauna silvestre. Extravíos debido al pánico, atropellamientos, lesiones corporales, lesiones auditivas, estrés, ataques al corazón, muertes por impacto, o perdida de orientación, son algunas de las consecuencias en la salud de los animales. "Las aves salvajes urbanas sufren desorientación, abandono del nido e incluso la muerte debido al ruido".
Además la formación recuerda que los ruidos que acompañan los espectáculos pirotécnicos en muchas ocasiones superan el umbral acústico a partir del cual se puede generar daños en el oído.