Impulso a la Jara se ha movilizado este sábado a favor de la Sanidad Rural en Robledo del Mazo, en el Valle del Gévalo, el territorio más despoblado de la Comarca de la Jara para exigir una Sanidad pública de calidad en el medio rural.
Eduardo Fernández, miembro de la plataforma, junto con un grupo de jóvenes del Valle, se ha dirigido hacia el consultorio local de Robledo del Mazo donde han participado en la concentración.
Yolanda Martínez, presidenta de Impulso a la Jara, que no ha podido participar de manera presencial en la movilización, ha comentado que "es necesario garantizar las mismas coberturas y prestaciones que tienen otras zonas de Castilla- La Mancha y que es necesario atender las especificidades de la población que reside en estos territorios", señalaba Martínez.
Impulso a la Jara se ha unido así a varios colectivos sociales y plataformas de la España Vaciada que trabajan a favor del cambio social en los pueblos donde es necesario un nuevo modelo sociosanitario rural y de Sanidad Pública que atienda las particularidades en esta parte del territorio de la provincia de Toledo que se encuentra en el Área de Salud de Talavera de la Reina.
Exigen también que se mantengan abiertos y activos los consultorios locales, que exista la figura cercana del sanitario rural y un programa básico de salud pública de prevención, así como unas plantillas suficientes para atender a una población dispersa y envejecida.
También, exigen el cumplimiento de la Ley General de Sanidad, dotando a las áreas de salud de un equipo multidisciplinar itinerante que llegue a todos los Municipios y pedanías y que convoquen con regularidad los Consejos de Salud comarcales.
En las semanas más críticas de la pandemia, "el SESCAM suspendía la atención presencial en los consultorios locales y la atención a los vecinos se ha limitado a consultas telefónicas, a tramitación de recetas, urgencias y algunos cuidados ineludibles a los enfermos crónicos concertados con citación previa", critica el colectivo.
Esta situación se ha prolongado, sostienen, "de manera injustificada" varios meses después, dejando sin una buena cobertura sanitaria a las personas mayores que residen en ellos.
Las personas de los pueblos de la Comarca de la Jara son en su mayoría personas mayores, muchas veces con enfermedades o dolencias crónicas a causa de su avanzada edad "y sin unos servicios que cubran las necesidades básicas de salud se genera inseguridad e incertidumbre entre los habitantes de los pueblos y se hace muy complicada la permanencia o el retorno a ellos", concluyen.