
Guías de turismo frente a la catedral de Toledo mostrando las firmas recogidas./ Imagen: Itziar Machicado
Los guías oficiales que ofrecen 'free tours' siguen su lucha en contra de la nueva ordenanza de turismo y han presentado ante el Ayuntamiento de Toledo las casi 6.000 firmas "de vecinos, comerciantes, guías de turismo o empresas de visitas guiadas que se ven afectadas con esta ordenanza".
Esta nueva normativa, que tiene previsto aprobarse en el Consistorio en septiembre, según ha informado el concejal de Turismo, José Manuel Velasco, reducirá grupos de hasta 30 personas en Hombre de Palo y otras dos vías-una de las calles más transitadas por turistas en el Casco Histórico-, prohibirá los megáfonos y se sancionará a aquellos que no cumplan con estas medidas.
Alberto López, uno de los guías oficiales de turismo de la ciudad, ha asegurado que esta ha sido una ordenanza que se ha hecho "deprisa y corriendo" además de que, después de tres reuniones con el concejal de Turismo, solo han sacado en claro que son ellos los que tenían que "ceder en algo".
"No se nos ha dado ningún tipo de concesión. Ni paraguas, ni elementos identificativos, ni el uso en determinados horarios de los altavoces. Cuando no hay ninguna ley, ni se ha hecho ningún estudio para argumentar que eso moleste", ha argumentado el guía.
"La Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha tiene una normativa propia. Ella es la competente en materia de turismo, no el Ayuntamiento de Toledo", ha defendido el concejal de Turismo.
José Manuel Velasco ha seguido explicando que regular los grupos a 30 personas es una cuestión de "movilidad y seguridad". "Este tipo de cuestiones se establecen en relación a nuestras competencias municipales".
Uso de paraguas, ¿si o no?
"¿Qué daño hace un paraguas en la Plaza Zocodover?", se pregunta Alberto López. "Nos quieren quitar este elemento identificativo, cuando mucha gente llega perdida a la plaza y acuden a nosotros a que les informemos de que pueden hacer", continua.
El concejal de Turismo ha explicado que dentro de esa ordenanza se menciona el tema de la publicidad en la calle. "Esto sale en el requerimiento de las Naciones Unidas y de la organización Ciudades Patrimonio".
Velasco ha explicado que en este punto se habla de "una publicidad regulada de una manera especial y que esa publicidad no perjudique en ningún momento a la visión sus centros históricos cuando se visitan".
Horas de "colapso" en el centro de la ciudad
Silvia Verde, guía oficial de turismo de Toledo, ha defendido que "el problema existe" entre las 10:00 de la mañana y la 13:00 horas. "Se produce un colapso porque coincide con el reparto del abastecimiento a la hostelería".
De esta manera, Verde ha sugerido que se aplique la reducción de la tasa turística en los autobuses a partir de las 12:00 horas y que sea en este horario cuando se acepten esos "grandes" grupos. "Si vienen a esa hora, comerán en la ciudad, o si vienen por la tarde, dormirán en la ciudad. Con lo cual, están moviendo y dinamizando, la economía local".
Velasco ha contestado también a esta cuestión matizando que, es una decisión que se tiene que tomar con datos. "Cuando acabe el año observe todo esto y tenga claro cuál es la realidad de la ciudad de Toledo, pues a lo mejor se puede vincular al pago de la tasa la posibilidad de visitar la ciudad".
Propuestas para el Ayuntamiento
Silvia Verde ha argumentado las alegaciones que plantearán próximamente al Ayuntamiento de Toledo. Entre ellas está la propuesta de la tasa que cobra el Consistorio a los autobuses turísticos, con la intención de que los vecinos puedan beneficiarse también de ella.
Y para ello proponen rebajar su IBI, el impuesto más elevado en el Casco Antiguo, "para que los residentes vean directamente un beneficio en sus bolsillos que les ayude a sobrellevar el impacto de la cantidad de visitantes que llegan a diario a la ciudad de Toledo", ha argumentado la guía.
José Manuel Velasco ha indicado que el último día para presentar las alegaciones será el próximo viernes 19 de septiembre. Y tras leerlas poder reunirse con "todo el mundo".
"Quiero reunirme sin prisas, sin plazos y en el sentido de poder hablar tranquilamente con todos los colectivos para ver cuáles son las alegaciones que se han hecho y si en cierta forma alguna hay que atenderla y hay que variar la ordenanza en algún punto", ha concluido el concejal.