La Asociación de Vendedores Ambulantes de Castilla La Mancha ha reunido a alrededor de medio millar de personas en la manifestación que han llevado a cabo en Toledo para protestar por la situación laboral a la que se enfrentan con las medidas especiales impuestas contra la pandemia de coronavirus. En municipios de la región con restricciones de nivel 1, 2 y 3 no se les permite ejercer su trabajo al aire libre por la suspensión de mercadillos, que sí pueden abrir -al 30%- en las localidades de Toledo en las que solo están activas las medidas de carácter provincial-.
"No se nos puede dejar en la estacada a los vendedores ambulantes de esta manera y queremos explicar el por qué de nuestra impotencia y descontento, y es que es tan sencillo como que nuestra actividad se realiza al aire libre, justo donde dicen las autoridades sanitarias que hay 20 veces menos riesgo de contagio que en cualquier lugar cerrado", exponían en el manifiesto al que dieron lectura este jueves en la manifestación.
Desde el parque de La Vega y atravesando diversos espacios del Casco Histórico, la manifestación concluyó en el Palacio de Fuensalida, sede del Gobierno regional, al que reclaman flexibilizar el decreto que impone Sanidad y que limita la actividad de mercados y mercadillos al aire libre. El presidente de los vendedores ambulantes de la región, Vicente Jareño, según recogía EFE, señaló que le parecía "ilógico" que no se les permita ejercer su actividad a pesar que donde pueden hacerle la desarrollan con "innumerables medidas".
Por ello, reclaman trabajar, "por que todos los sectores están funcionando, mejor o peor, con alguna restricción de aforo o no, pero funcionando y el nuestro lo dejan a la deriva y herido de muerte, es algo que no podemos consentir. Toda la población sabe que el virus ya forma parte de nuestras vidas, la gente está totalmente concienciada de ello... ningún negocio se puede mantener de esta manera", agregaban en el manifiesto. Calculan que la situación, con las medidas que se están imponiendo actualmente, está afectando a más de 2.000 familias de Castilla-La Mancha.
"Necesitamos reactivar y reanudar la actividad con el 100% de puestos de manera inminente", insisten al tiempo que subrayan las medidas que creen que hay que ejercer para seguir desarrollando su actividad con seguridad: "ampliar el espacio para dejar distancia entre puesto y puesto, reducir metros de los propios puntos de venta, para dejar distancia entre puestos, sacar si fuese necesario los vehículos de los recintos, retranquear los puestos para dar más amplitud a las calles o control de aforo, pero en ningún caso de puestos".
En este sentido, remarcan que la "única solución" pasa por que el Gobierno regional les tienda la mano y esté "dispuesto a colaborar junto a las autoridades sanitarias, permitiendo a los ayuntamientos la celebración de mercadillos al aire libre con el 100% de los puestos con todas las medidas de distanciamiento, seguridad y sanitarias tanto a población como a profesionales de la venta ambulante".
Imágenes de la manifestación: Francisca Bravo