El subdelegado del Gobierno en Toledo, sobre la inminente aprobación del Plan del Tajo: "Las cosas van bien, con prudencia"

El río Tajo a su paso por Talavera el 28 junio 2022 / Foto: Cátedra del Tajo

El subdelegado del Gobierno en la provincia de Toledo, Carlos Ángel Devia, ha asegurado que “las cosas van bien, con prudencia” en torno al plan de cuenca del Tajo, que votará la próxima semana el Consejo Nacional del Agua, y aunque “no está del todo terminado”, ha admitido que la nueva adaptación del plan del trasvase “va a permitir que aquí los recursos sean un poquito más altos”.

Sus declaraciones llegan después de que la semana pasada el periódico La Verdad desvelase que en la documentación sobre la mesa para la reunión del Consejo Nacional del Agua del 29 de noviembre el aumento de los caudales ecológicos en el río no se produciría, a partir de 2026, si el estado ambiental del Tajo es bueno.

Una información que provocaba la reacción de la Plataforma en Defensa del Tajo de Toledo que lamentaba que la recuperación de los caudales ecológicos pueda ser una “falacia” para 2026.

Un plan “ambicioso” aunque con algunos problemas para el noroeste de Toledo

De momento, y mientras se produce la reunión del Consejo Nacional del Agua, este martes Devia, a preguntas de los medios tras la rueda de prensa en la que se han dado a conocer los premiados en la 26ª edición de los Galardones Empresariales de la Federación Empresarial Toledana (Fedeto), ha asegurado que el “plan es ambicioso”, aunque es cierto que ya han transcurrido dos años “en los que no hemos recuperado nada en los pantanos de cabecera”.

No obstante, ha agregado que la zona noroeste de la provincia de Toledo es la que “podría tener más problemas”, a excepción de algunos municipios pequeños de los Montes de Toledo, y esa zona es el objetivo de la Confederación Hidrográfica del Tajo, siendo “de gran desarrollo industrial” y la que necesita esas concesiones de agua que la Comunidad Autónoma está “peleando muy duramente con Madrid”.

Dicho esto, el subdelegado ha recordado que quien levantó el conflicto del agua fue Castilla-La Mancha, desde el expresidente regional, José María Barreda, y ahora “hemos tenido la suerte de disponer de una ministra que lo ha entendido”.

“Siempre partiendo de que el agua debe ser para todos, el agua para consumo humano es para todos, pero lo que no puede ser es la cuenca cedente tener problemas y la que lo disfruta tener excesos” generando riqueza con ello, convencido de que “se ha dado un paso importante y tanto Valencia como Murcia o Alicante deben utilizar medios que tienen a su disposición y que, por ahora, no están utilizando al cien por cien y que pagó el Gobierno de España”.