El Hospital Nacional de Parapléjicos, dependiente del Servicio de Salud de Castilla-La Mancha, consolida el tiro con arco como una parte destacada de su oferta deportiva adaptada. Gracias a la colaboración con la Real Federación Española de Tiro con Arco (RFETA) que ha donado el material necesario y proporcionado apoyo técnico, esta disciplina se ha establecido con éxito desde hace dos temporadas.
Actualmente, una media de diez personas con lesión medular u otras discapacidades físicas practican tiro con arco en las instalaciones del centro, junto al pabellón polivalente Estrella de los Mares del centro toledano. Este deporte no solo fomenta la rehabilitación física, sino también el desarrollo personal y social de los participantes.
“Desde octubre de 2023, trabajamos codo a codo con el hospital y el tiro con arco ha ganado numerosos adeptos”, ha señalado Almudena Gallardo, directora técnica de la Real Federación Española de Tiro con Arco y ex campeona de Europa. La demanda ha sido tal que han tenido que ampliar a dos sesiones, los lunes y los miércoles, de entrenamiento semanales.
Además, gracias al programa Promesas Paralímpicas, en sintonía con el Comité Paralímpico Español, dos de sus deportistas, Isabel Martínez, subcampeona de España, y Rebeca León, están destacando a nivel nacional.
Miguel Ángel Gutiérrez, monitor de tiro con arco de la RFETA en el Hospital Nacional de Parapléjicos, ha subrayado que “el objetivo es que los participantes puedan continuar practicando este deporte una vez finalizado su paso por el hospital”. Para ello, facilitan el contacto con clubes de tiro con arco cercanos a su lugar de residencia. Además, han abierto las puertas de esta actividad al personal sanitario del hospital, como médicos, enfermeras, fisioterapeutas y terapeutas ocupacionales.
Por su parte, el jefe del Servicio de Rehabilitación del hospital, el doctor Ramiro Palazón, ha destacado los múltiples beneficios de esta disciplina. “El tiro con arco mejora la fuerza, la coordinación y la concentración, al tiempo que fomenta la autoestima y la superación personal. Es una herramienta terapéutica transformadora que integra lo físico, lo emocional y lo social, con una especial indicación en pacientes con afectación incompleta de miembros superiores”.
Ambos miembros de la RFETA, Almudena Gallardo y Miguel Ángel Gutiérrez, destacan la sintonía y estrecha colaboración con los monitores del Servicio de Rehabilitación Complementara del Hospital Nacional de Parapléjicos José Miguel López y Mª José de la Llave.
Una disciplina de gran tradición paralímpica
El tiro con arco ha formado parte de todos los Juegos Paralímpicos desde su debut en Roma, en 1960, con pequeñas adaptaciones que garantizan la accesibilidad y la igualdad de condiciones. Las reglas son prácticamente idénticas a las de su versión convencional. Los arqueros disparan flechas hacia una diana a distancias específicas (18 metros en sala y, al aire libre, 50 metros con arcos compuestos y 70 metros con arcos recurvos) buscando obtener la mayor puntuación posible.
La principal diferencia radica en la clasificación funcional de los deportistas, quienes se agrupan según el tipo y grado de discapacidad: W1, compuesta por arqueros con discapacidades que afectan tanto a los brazos como a las piernas, normalmente utilizando arcos compuestos; W2, deportistas en silla de ruedas con mayor funcionalidad en los brazos y estándar, integrada por arqueros que pueden mantenerse de pie o con ayuda de prótesis, pero con limitaciones en la estabilidad.
Con iniciativas como esta, el Hospital Nacional de Parapléjicos refuerza su compromiso con la inclusión y el deporte como herramientas esenciales para la rehabilitación y la mejora de la calidad de vida de las personas con lesión medular.