La recogida de residuos en el Casco Histórico de Toledo lleva años siendo tema de debate por los inconvenientes que han presentado los distintos sistemas que se han puesto en marcha, como el que estaba implantado actualmente, el conocido 'bolseo'. El impacto visual en una ciudad Patrimonio de la Humanidad, la suciedad en las calles, el incumplimiento de horarios o la ausencia de un método para que los residentes puedan reciclar son algunos de los problemas que se quieren abordar con el nuevo contrato de este servicio público.
El equipo de Gobierno de PP y Vox puso en marcha el pasado mes de septiembre una prueba piloto con la instalación de 18 contenedores en distintas zonas del barrio antiguo que, una semana después, se ampliaron hasta alcanzar la treintena. Según la concejala de Obras, Servicios y Parques, Loreto Molina, esta ampliación se debe al "éxito" de la medida. "Los resultados que se están obteniendo son bastante positivos", subrayó.
No obstante, también reconoció algunos errores en esta prueba que habían sido comunicados por la ciudadanía como el emplazamiento inadecuado de algunos contenedores, el tamaño de los mismos o el incumplimiento de horarios para depositar la basura.
Entre las críticas, se encuentran las de la Asociación Vecinal del Casco Histórico, Iniciativa Ciudadana, que hizo algunas aportaciones para mejorar el nuevo sistema. Entre ellas, destaca la necesidad de mejorar "su diseño" para adaptarse a "un barrio Patrimonio de la Humanidad". Y es que, los instalados son contenedores con una estética más antigua, que poco tienen que ver con los más modernos instalados recientemente en otras zonas de la ciudad.
En este sentido, la propia asociación vecinal ha dado a conocer diversos datos ofrecidos por el concejal-presidente del distrito del Casco Histórico, Rubén Lozano Guerra, respecto a la implantación definitiva de este sistema de recogida mixto que no eliminará por completo el 'bolseo' en alguna que otra zona con las vías públicas más estrechas del barrio, donde la colocación próxima de contenedores no es posible.
Contenedores más pequeños y con temas de paisaje urbano
Según expone el colectivo, los contenedores grises de 800 litros de diseño industrial que se están colocando en este periodo de pruebas en un par de zonas del Casco Histórico son "provisionales y no serán los contenedores que se instalen de forma definitiva". Así, se está estudiando la elección de contenedores de 400 litros que tendrán un recubrimiento con temas de paisaje urbano acorde a un barrio medieval, con la intención de disminuir su impacto visual en las vías públicas.
Asimismo, indica que se está analizando la colocación final de, aproximadamente, unos 25 contenedores en puntos fijos, y el resto con contenedores de quita y pon siempre atendiendo el horario autorizado de depósito de residuos de 20:00 a 23:00 horas.
También avanzan la intención del Gobierno local de instalar en el Casco Histórico tendrá dos puntos limpios de recogida de residuos con la localización aún por decidir, aunque en principio se habla de posibles locales situados en las calles Martín Gamero, Alfonso X o Alfonso XII. Sin embargo, sobre la recogida selectiva de residuos en el Casco Histórico por contenedores diferenciados, el Ayuntamiento de Toledo aún no ofrece información concreta, agrega la asociación vecinal.
"Las pruebas de estudio de instalación de los contenedores se están concentrando en los siguientes criterios: situación y distribución óptima de los contenedores y volumen de residuos depositados en ellos. También se analizan incidencias como los casos aislados de vandalismo, cambio de lugar de contenedores no autorizado llevado a cabo por particulares o comerciantes, depósitos de residuos en los contenedores fuera de horario relacionados con negocios de alojamientos turísticos, y arranque de carteles en los contenedores con el horario autorizado de depósito de residuos", recoge también Iniciativa Ciudadana sobre esta prueba piloto.