El Ayuntamiento de Toledo ha acordado en sesión plenaria poner en marcha un plan de divulgación, formación y recuperación de antiguos oficios en la ciudad, un proyecto que contará como uno de sus ejes fundamentales el futuro Centro de Promoción de la Artesanía, ubicado en la Mezquita de Tornerías. Asimismo, se impulsará la creación de un sello de calidad de la mano de la Diputación y el Gobierno autonómico.
El acuerdo a la moción presentada por el concejal no adscrito, Luis Miguel Núñez, en el pleno municipal contó con el apoyo de PP, PSOE e IU Podemos, la abstención de Ciudadanos y el rechazo de Vox. En ella se establecían dos principales puntos: la puesta en marcha del mencionado plan e instar a la Diputación y la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha a implicarse en el proyecto en virtud de sus competencias.
En este sentido, el concejal de Promoción Económica, Innovación, Empleo, Turismo y Artesanía, Francisco Rueda, señaló que este año 2021 el Gobierno regional completará las obras del Centro de Promoción de la Artesanía y se equipará para que esté en funcionamiento en 2022, según le ha trasladado la consejera de Economía, Empresas y Empleo, Patricia Franco. El presupuesto de este año contempla una partida de un millón de euros para esta iniciativa.
La apuesta es que pueda ser también un centro formativo en una ciudad con "un capital importante" en este ámbito con espacios como el Centro Municipal de Empleo Carlos III o la Escuela de Arte, indicó el edil, que valoró una propuesta que "habla un poco de todas las áreas" de su Concejalía y que "probablemente es también transversal a otras". "Es el momento de establecer un plan o una estrategia" para impulsar la recuperación de estos antiguos oficios, "empezando quizás por damasquinados y artesanos", aseveró Rueda.
Un turismo sostenible para impulsar los antiguos oficios
"Estos oficios nos afectan a otros motivos que son importantes. Vamos a entrar sin duda a la economía circular en los próximos años y tiene mucho que ver con los productos bien hechos, duraderos, que se pueden reparar y recomponer. Es una apuesta por la vida larga de los productos que solo es posible si contamos con profesionales que sean capaces de hacerlo", explicó el concejal sobre este tipo de oficios cuya depreciación "tiene que ver con la irrupción de un turismo masivo, de 'low cost', que busca una experiencia básica, de usar y tirar".
Por ello, apuesta por "aprender la lección" tras la pandemia y trabajar por un modelo turístico sostenible con el que "recuperar un visitante con expectativas culturales de mayor nivel, de más enriquecimiento, que apueste por estos oficios. Será de uno de nuestros principales atractivos en este nuevo modelo" turístico, agregó Rueda.
El objetivo está ligado también a la puesta en valor del patrimonio cultural, artístico y la artesanía de la provincia de Toledo, una de las de "mayor acerbo y legado en este área" con ejemplos como "El Puente del Arzobispo, Talavera de la Reina, Lagartera, la forja, la alfarería... y dentro de esto brilla la ciudad de Toledo, que aporta dos oficios extraordinarios y muy singulares que son damasquinados y espaderos, con muy poca presencia similar en todo el mundial".
Tres fases
El concejal no adscrito propuso en su moción llevar a cabo la iniciativa en tres fases. Una inicial por parte del Ayuntamiento de Toledo para que de la mano de maestros artesanos concrete y ejecute un plan de divulgación para jóvenes mediante acuerdos con centros educativos y que se haga extensivo a personas en desempleo con intereses en formarse en estos trabajos.
La segunda fase sugiere que ha de tener como eje el futuro Centro Regional de Artesanía que se está ultimando en la Mezquita de Tornerías, donde se pueda impartir una formación especializada, que ponga en valor y dignifique estos oficios. Y desde este lugar, planificar y guiar el paso a la actividad profesional de los alumnos.
Y una tercera fase, centrada en aquellos alumnos que den el paso al mundo laboral a través de estos oficios. Proporcionándoles asesoramiento, seguimiento, ayudas fiscales para su actividad y el apoyo en la búsqueda de un valor añadido en sus productos a través de un sello de calidad diferenciada que distinga el esfuerzo en la realización de sus trabajos y la excelencia de los mismos frente a la producción industrial y las imitaciones.
Acuerdo mayoritario
Además del PSOE, que estuvo de acuerdo en las peticiones de esta moción "con algunos matices", también el PP apoyó la misma porque, según apuntó el edil José López Gamarra, "se trata de creer o no si interesa y si es beneficioso desde el punto de vista social, laboral y económico. Yo lo tengo claro, interesa y mucho, y más en estos momentos en el que muchas personas están perdiendo sus trabajos".
De su lado, el concejal Julio Comendador, de Cs, explicó que no podían votar a favor aunque les parecía "una idea muy buena". "En España no tenemos un modelo educativo adecuado en el que la formación profesional se ponga en valor, no hay relevo generacional en este tipo de oficios, y seguimos a la espera de que se impulse esta formación", manifestó el edil, que reprochó también que los comercios dedicados al comercio de artesanía y souvernis se quedará fuera del plan de rescate del Gobierno central.
"No nos hemos terminado de creer a lo largo de nuestra historia que estos oficios son importantes y son desarrollo económico. Esperamos que llegue el momento", señaló el portavoz de IU Podemos, Txema Fernández, que votó también a favor de la moción y lamentó que la ciudad no haya impulsado un museo etnográfico que recoja estas tradiciones "tan bonitas", "más allá de la relación que hay en Farcama, una feria de intercambio comercial puro y duro, nada más".
Por su parte, la portavoz de Vox, María de los Ángeles Ramos, manifestó que "pesar de que son oficios muy importantes, no es es el momento de iniciar ningún plan" pues a su juico "el plan tiene que ser ayudar ahora a los empresarios de estos oficios que se han visto obligados a cerrar por la pandemia".