Además del derrumbe de parte de la fachada de un edificio del barrio de Covachuelas, las intensas precipitaciones que la borrasca Oliver dejó este pasado sábado en la ciudad de Toledo, provocaron también incidencias en infraestructuras municipales como el renovado pabellón de la Escuela de Gimnasia, que reabrió sus puertas el pasado mes de marzo.
A pesar de la obra que se acometió durante más de un año, este fin de semana se vio afectado por problemas de goteras que el Ayuntamiento va a requerir solucionar a la empresa que ejecutó las obras, tal y como ha trasladado el portavoz municipal, Juan José Alcalde.
"Lógicamente está en garantía el pabellón y se va a solucionar", ha manifestado el también concejal de Fondos Europeos que apunta que, "afortunadamente", la lluvia "ha dejado a la vista que había ciertas deficiencias de goteras".
El portavoz del Gobierno local apunta que también se filtró agua en el pabellón a través de la puerta de entrada, que es "la misma que había" antes de las obras de rehabilitación. "Hubiese entrado con el pabellón antiguo o nuevo", afirma.
Inundaciones en Azucaica y la avenida de Barber
A preguntas de los medios sobre las inundaciones que también afectaron a vías públicas de distintos barrios de la ciudad como el de Azucaica, Alcalde ha defendido que el actual equipo de Gobierno local es "el único que está haciendo algo para evitar esas inundaciones".
El arenero que está construyendo para recoger agua del arroyo Villagómez ha funcionado y contará con una segunda fase para ampliar el mismo, tal y como ha detallado el edil.
"Hemos descubierto también que hay otra zona de inundaciones, que es la avenida Barber", donde afirma que se hizo "una obra defectuosa en la anterior legislatura" por la que también van a pedir responsabilidades a la empresa que la ejecutó en 2022.
"Iba a ser una solución para los vecinos pero está siendo un problema también en Coronel Baeza, que es la calle justo de abajo", ha señalado el concejal 'popular'.