El Gobierno local de PP y Vox afirma que ya se ha procedido a la limpieza del vertido de toallitas y plásticos en el río Tajo que la Plataforma en Defensa del Tajo en Toledo denunció este martes que se produce en el margen derecho de la senda ecológica, entre entre el molino de Saelices y el de Santa Ana.
A preguntas de los medios, el concejal de Río Tajo, Medio Ambiente y Deportes, Rubén Lozano, ha indicado que se trata de un vertido que "está registrado desde el pasado mes de agosto" y que se trata de "uno de las decenas" que hay en la ciudad, tal y como constató la Cátedra del Tajo UCLM-Soliss el pasado año con la herramienta de investigación ciudadana InvesTAJO.
"Somos conscientes de los numerosos vertidos que sufre el río desde hace décadas, y trabajamos para eliminarlos cuanto antes", ha subrayado el edil, que recalca que, desde que entraron al gobierno el pasado mes de junio, han adquirido "el compromiso de seguir eliminando estos vertidos, algunos incontrolados y otros no detectados, pero que llevan décadas contaminando las aguas del río".
Así, insiste en que están "empeñados en mejorar la salud del río y recuperar las riberas y la senda ecológica para que estén como merecen estar". "Es un vertido más de los numerosos que nos encontramos a nuestra llegada al gobierno y que tendremos que eliminar con nuestro Plan de Vertidos Cero", ha agregado.
Además, ha agradecido el trabajo de "la Cátedra del Tajo, de la Fundación Soliss y de otras empresas que están mostrando su disposición a colaborar con este objetivo del Ayuntamiento y de toda la ciudad, que es mejorar la calidad del agua del Tajo".
El Gobierno local destaca que con el mencionado Plan de Vertidos Cero han cerrado ya dos de los puntos localizados que contaminaban el río; el de la Peraleda y el del Arroyo del Aserradero. A ello, añade, "se sumarán próximamente la solución para la depuradora del campus de la Fábrica de Armas y la estación de bombeo que se instalará en los Cigarrales y que permitirá acabar con los vertidos al Tajo".
"Toallitas, plásticos y todo tipo de fibras vertidas al Tajo"
Sobre la ubicación de este vertido, la Plataforma en Defensa del Tajo en Toledo señaló que se sitúa en el tramo de la senda ecológica que ha sido rehabilitado recientemente y que quedó "manchado y tapizado de una gruesa y extensa capa de toallitas, compresas, papel, plásticos y todo tipo de fibras vertidas al río Tajo, acompañando también a otros rincones del río donde se arremolinan grandes cantidades de envases, botellas de plástico y chatarras".
En este sentido, explicó que aunque las lluvias caídas en la ciudad de Toledo durante estos últimos días "no han sido excepcionalmente abundantes", sí que "han evidenciado de nuevo la obsolescencia y defectos de diseño y ejecución de las infraestructuras de alcantarillado, también de su deficiente mantenimiento, especialmente las que discurren en las proximidades del río Tajo".
Por, el colectivo defensor del río intentó dar traslado de la denuncia de estos hechos que, lamenta, "solo merecieron la atención del Cuerpo de Agentes Medioambientales" pese a haberlo comunicado también a "la Concejalía del río Tajo, el Seprona y de la Confederación Hidrográfica del Tajo".
IU-Podemos achaca el vertido a la falta de inversiones por el contrato del agua a Tagus
Tras la denuncia de la Plataforma, el grupo municipal de Izquierda Unida-Podemos afirma que los vertidos que se están produciendo al Tajo "podrían haberse mitigado de no haber perdonado a la empresa concesionaria del Servicio Municipal de Agua Potable y Alcantarillado, Tagus, los 70 millones de euros en inversiones que iban incluidos en la oferta por la que se adjudicó el contrato con el que aún tiene la responsabilidad de atender a la ciudad hasta 2032".
El portavoz de IU-Podemos, Txema Fernández, manifiesta que estos vertidos llegan al cauce del río "desde una red de alcantarillado que debe cuidar la empresa adjudicataria, a la cual se le adjudicó un contrato en 2007 para dar servicio de abastecimiento y alcantarillado a una ciudad que según las previsiones iba a crecer hasta los 200.000 habitantes, pero cuando comprobó que no sería así, consiguió que le perdonaran 70 millones de euros de inversión”.
Agrega también el edil que al Gobierno local de PP y Vox "le toca asumir la responsabilidad y prever acciones para los -vertidos- que se abrirán nuevos derivados de los futuros desarrollos urbanos, como el PAU Palacio (antiguo PAU del Observatorio), en cuyo proyecto urbanizador no se ha contemplado ningún sistema de depuración de agua de esas 555 viviendas y resto de servicios; vertidos que previsiblemente acabarán en el cauce del río por el desagüe que existe por debajo de la carretera N-403, la Avenida Adolfo Suárez".